1.700 inscritos, casi medio millar de copas vendidas, 220 comidas servidas el sábado por la noche… La primera edición de la feria Libros y Vinos en Terre de Loire fue un éxito.
Jean-Pierre Delpuech, presidente de la asociación Livres et vins en Terre de Loire, no ocultó su felicidad el domingo por la noche. “Queríamos que este espectáculo fuera popular, festivo, acogedor, accesible, familiar y gratuito, que formara parte del territorio de la AOC Orleans y Orleans-Cléry. Revivimos un recuerdo, introdujimos vinos”, se regocijó. Todos los involucrados en este nuevo evento quedaron contentos con su éxito, porque el público respondió.
“Descubrí algunos buenos vinos, demasiado confidenciales”
Unos 1.700 visitantes recorrieron los pasillos de la feria para conocer a los expositores. Como Anne-Lise, originaria de Orleans, Borgoña, que, mientras probaba los vinos del viñedo Chant d’oiseau, confiesa: “Es una buena sorpresa. Descubrí buenos vinos que siguen siendo demasiado confidenciales. Es bueno darlos a conocer y resaltar el trabajo de los viticultores”.
Palabras que resonaron en los profesionales. “Conocemos gente interesada en nuestros vinos, que quiere saber cómo se elaboran. Hay verdaderos intercambios”, aseguró Bénédicte Piel, enóloga de Clos Saint-Fiacre, agradeciendo a los organizadores la calidad del evento.
La satisfacción también estuvo del lado de los autores, editores y libreros, que apreciaron que estos mismos visitantes se acercaran con facilidad a la literatura y mostraran la misma curiosidad por los libros presentados, que hablaran de poesía, historia local o enología.
Las cuatro conferencias de alto nivel sobre la palabra y la historia del vino, celebradas en una sala repleta, ilustraron este vínculo evidente entre literatura y vino. Con, como beneficio adicional, un dictado tomado del Gargantúa de Rabelais que reunió a una treintena de personas, seguido de la degustación de algunas lecturas sobre vinos.
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