Un tribunal alemán ha reiniciado el proceso contra un exguardia de las SS del campo nazi de Sachsenhausen, de 100 años, cuya comparecencia había sido denegada debido a su estado de salud.
El tribunal de Hanau (centro) tendrá que pronunciarse nuevamente sobre la apertura o no de un juicio, anunció el martes el Tribunal Regional Superior de Frankfurt.
El acusado es un exguardia de las SS del campo nazi de Sachsenhausen, al norte de Berlín, acusado desde el verano de 2023 de complicidad en el asesinato de prisioneros en más de 3.300 casos, entre 1943 y 1945, durante la Segunda Guerra Mundial.
Según los medios alemanes, el hombre se llama Gregor Formanek.
La fiscalía, que pidió el juicio, acusa a este hombre, joven en el momento de los hechos, de “haber apoyado, como miembro de los equipos de guardia de las SS, el asesinato cruel y pérfido de miles de detenidos”.
Un primer análisis psiquiátrico de 2022, que consideraba al sospechoso “al menos parcialmente apto para ser juzgado”, fue contradicho por un segundo, realizado en 2024, que lo consideró no apto.
Por ello, en mayo, el tribunal de Hanau se negó a abrir un proceso basándose en las últimas pericias.
Pero “la información del informe no es suficiente”, considera el tribunal de apelación.
Entre 1936 y 1945, el campo de Sachsenhausen acogió a unos 200.000 prisioneros, en su mayoría opositores políticos, judíos y homosexuales.
Decenas de miles de ellos murieron, víctimas principalmente del agotamiento debido al trabajo forzoso y las crueles condiciones carcelarias.
En los últimos años se han celebrado en Alemania varios juicios contra ex empleados de campos nazis, desde la condena en 2011 del ex guardia del campo de exterminio de Sobibor, John Demjanjuk, que sentó un precedente.
Dada la gran edad de los acusados, los juicios en ocasiones no podían celebrarse por motivos de salud o, cuando se celebraban, los condenados morían antes de ser encarcelados, como John Demjanjuk.
Josef Schütz, exguardia de un campo de concentración condenado en junio de 2022 a cinco años de prisión, murió menos de un año después, a la edad de 102 años, mientras su defensa apelaba.
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