Una red de ciudadanos búlgaros que espían para Rusia está siendo juzgada actualmente en Londres, tras haber intentado, en particular, atrapar a un periodista de investigación especializado en la inteligencia rusa.
El caso parece surgido directamente de la imaginación de un autor de thriller. Un grupo de espías búlgaros a sueldo de Moscú está siendo juzgado actualmente en Londres, acusado de haber tendido una “trampa de miel” a un periodista de investigación.
Según el fiscal británico, estos ciudadanos búlgaros habían atacado a un periodista de investigación del sitio de noticias Bellingcat y habían intentado atraerlo a un “trampa de miel” a través de Facebook. También fue el búlgaro Christo Grozev, un especialista en espionaje ruso que investigó el envenenamiento en 2018 del agente doble ruso Sergei Skripal en Salisbury, Inglaterra. Una joven espía de 30 años, Vanya Gaberova, supuestamente envió una solicitud de amistad en Facebook a Grozev. En el transcurso de los intercambios, esta última habría caído bajo el encanto de la joven.
El trío de espías (Katrin Ivanova, de 33 años, Vanya Gaberova, de 30 y Tihomir Ivanchev, de 39) estaban actuando…
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