El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, se reunió el viernes con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en Palm Beach, Florida, anunció el sábado el portavoz de la Alianza Atlántica.
“Discutieron todos los problemas de seguridad global que enfrenta la Alianza”, dijo la portavoz Farah Dakhlallah en un breve comunicado, sin más detalles. El ex primer ministro holandés había indicado que quería reunirse con Donald Trump, dos días después de su elección el 5 de noviembre. Luego dijo que quería discutir con él la “amenaza” que representa el fortalecimiento de los vínculos entre Rusia y Corea del Norte.
“Espero sentarme con el presidente Trump y ver cómo vamos a garantizar colectivamente que enfrentemos esta amenaza”, dijo el 7 de noviembre, al margen de una cumbre de líderes europeos en Budapest.
Desde entonces, ha seguido advirtiendo sobre los peligros de un acercamiento entre China, Corea del Norte e Irán, tres países acusados de ayudar a Rusia en su esfuerzo bélico contra Ucrania. El apoyo de Corea del Norte a Moscú ilustra la necesidad de apoyo de Estados Unidos, cuya propia seguridad está en duda, recordó Rutte en París el 12 de noviembre.
Rusia apoya financieramente a Pyongyang y le proporciona experiencia en tecnologías de misiles. “Es muy preocupante. Estos misiles representan una amenaza directa al territorio estadounidense”, argumentó.
Asimismo, al colaborar con Corea del Norte, Irán y China, Rusia “no sólo amenaza a Europa sino que también amenaza la paz y la seguridad en el Indo-Pacífico y en América del Norte”, según él.
Los países europeos también están preocupados por la promesa del multimillonario estadounidense de poner fin a la guerra en Ucrania en 24 horas, con un acuerdo que va en contra de los intereses de Kiev y los deja al margen.
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