ACasi meses en el mar, con escalas en Singapur, Italia, España, Portugal, Turquía… 102 contenedores que transportaban 2.100 toneladas de residuos sospechosos regresaron el viernes al puerto albanés de Durrës, del que habían salido a principios de julio, constató la AFP.
El barco “Moliva”, que llevaba unos diez días parado frente a la costa de Durrës, pudo fondear allí el viernes por la mañana y las autoridades deben hacerse cargo de los contenedores, según los funcionarios del puerto.
Una vez descargados del barco, serán secuestrados por la fiscalía de Durrës, que examina su contenido desde hace semanas: según una ONG, están llenos de residuos tóxicos y no, como se indicó inicialmente a la aduana, de óxido de azufre. hierro.
Los contenedores serán transportados fuera del puerto, a una zona segura vigilada por la policía, donde serán abiertos y analizados su contenido.
La fiscalía de Durrës, que abrió una investigación por “contrabando de mercancías prohibidas” y “abuso de poder”, en colaboración con la Oficina Europea Antifraude (Olaf), pidió el lunes a varias instituciones públicas que pusieran a su disposición sus laboratorios y expertos para realizar los análisis.
Según información proporcionada por Basel Action Network (BAN), una ONG especializada en el seguimiento de residuos tóxicos, estos están llenos de polvo de horno de arco eléctrico (EAFD).
Este polvo, clasificado en la categoría de residuos tóxicos por la mayoría de las legislaciones, debe almacenarse y transportarse en condiciones muy estrictas.
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