¿Cuáles eran los antecedentes penales del cirujano en Bretaña?

Joel Le Scouarnec comparecerá ante el tribunal penal de Morbihanen Vannes, en los próximos meses, según anunció el fiscal de Lorient, este lunes 30 de septiembre. De los 299 pacientes de Joël Le Scouarnec identificados por los gendarmes durante la investigación, 254 víctimas son bretonas. Porque, de 1994 a 2007, el cirujano trabajó en varios hospitales de la región. Su periodo más largo de actividad como cirujano visceral, estuvo en el policlínico Sacré-Cœur de Vannes de 1994 a 2004. Aquí es también donde el pedófilo estuvo más activo. El esta acusado de 67 violaciones cometidas contra menores de 15 años, 11 violaciones sin este agravante y 128 agresiones sexuales.

Pero, durante esta década, Joël Le Scouarnec también hizo numerosos reemplazos en otros establecimientos médico: en Quimperlé, Malestroit, Lorient y Pontivy. Cada vez anota en una libreta la fecha, el nombre del niño y un breve comentario de lo que le hizo. Notas insoportables que atestiguan los permanentes impulsos sexuales del ex cirujano.

Dejó Vannes para trasladarse al centro hospitalario Bretagne Sud de Lorient, donde trabajó del 1 de enero al 4 de octubre de 2004, siempre con suplentes, esta vez en Vannes y Quimperlé donde finalmente trabajó a tiempo completo desde 2005 hasta septiembre de 2007.. el deja atras 8 víctimas de violación, menores de 15 años y 33 víctimas de agresión sexual. Pero su andadura criminal no termina ahí. En el hospital Jonzac de Charente-Maritime donde es designado junio de 2008 hasta el momento de su arresto el 2 de mayo de 2017, pero también en el centro hospitalario Ancenis de Loira Atlántico, donde realiza sustituciones ocasionales durante el mismo período, Joël Le Scouarnec todavía causa 12 pequeñas víctimas. Sin embargo, las autoridades médicas que lo contrataron en ese momento conocen su condena en 2005 a 4 meses de prisión por posesión de imágenes de pornografía infantil. Interrogada por los investigadores, la directora del hospital de Jonzac explicó que, no obstante, lo había reclutado, ya que “no hubo ninguna agresión física”.