En una cumbre celebrada el lunes en Arabia Saudita, los jefes de Estado de la Liga Árabe y de la Organización de Cooperación Islámica exigieron por unanimidad la retirada total de Israel de los territorios ocupados desde 1967, incluidos Cisjordania, Jerusalén Este y los Altos del Golán sirios. . “Una paz justa y integral en la región […] no se puede lograr sin poner fin a la ocupación israelí”, afirma la declaración final de la cumbre, que se basa en las resoluciones de la ONU y el plan de paz árabe de 2002. También reafirmaron su apoyo a la creación de un Estado palestino independiente.
Por su parte, el gobierno de Benjamín Netanyahu se opone firmemente a la creación de un Estado palestino. “Este no es un proyecto realista hoy en día”, declaró el Ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Saar, argumentando que tal Estado se convertiría en un “Estado de Hamas”. Sin embargo, la posición de Israel va en contra de las aspiraciones de la mayoría de la comunidad internacional, partidaria de la solución de dos Estados.
Condena de las acciones del ejército israelí
Los participantes en la cumbre también condenaron “enérgicamente” las acciones del ejército israelí, calificadas de “crimen de genocidio”. […] particularmente en el norte de la Franja de Gaza en las últimas semanas”, donde el ejército israelí lleva a cabo una ofensiva desde el 6 de octubre. Pidieron a la comunidad internacional “prohibir la exportación o transferencia de armas y municiones a Israel” y condenaron “los continuos ataques de las autoridades israelíes”. […] contra la ONU.
“El mundo está esperando” que la futura administración Trump ponga fin “inmediatamente” a las guerras en Gaza y el Líbano, declaró en Riad el primer vicepresidente iraní, Mohammad Reza Aref. Calificó los asesinatos de los líderes del Hamas palestino, en julio en Teherán, y del Hezbollah libanés, a finales de septiembre cerca de Beirut, como “terrorismo organizado” por parte de Israel. Al mismo tiempo, Hezbolá anunció que estaba “preparado para una larga guerra”, mientras que el ejército israelí descartó cualquier alto el fuego sin la “capitulación” del movimiento islamista libanés.
Calentamiento entre Irán y Arabia Saudita
En un contexto de conflicto regional, esta cumbre también destacó un acercamiento estratégico entre Arabia Saudita e Irán, después de siete años de tensiones. El príncipe heredero Mohammed bin Salman calificó a Irán de “República hermana” y pidió a Israel que “se abstenga de atacar” a su vecino. Irán, un aliado de Hezbollah y Hamas, ha denunciado los asesinatos selectivos de líderes palestinos y libaneses por parte de Israel como “terrorismo organizado”.
Arabia Saudita, que busca salir del conflicto en Yemen, condena sin embargo a Hezbolá como una organización terrorista. A pesar de las discusiones sobre un posible alto el fuego en el Líbano, las tensiones siguen siendo altas, e Israel condiciona cualquier acuerdo a la completa neutralización de Hezbolá.