¿Donald Trump cerrará de golpe la puerta a la OTAN? El diplomático Jacques Pitteloud, representante permanente de Suiza ante la alianza en Bruselas desde septiembre, asegura que no. En cambio, el próximo presidente estadounidense presionará a los europeos para que hagan más por su defensa, algo que sus predecesores ya han exigido.
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca hace temer una retirada de Estados Unidos. El futuro 47º presidente estadounidense muestra cierta hostilidad hacia la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Incluso amenazó, durante su campaña, con retirar a su país de la alianza militar. Entonces Europa estaría sola a cargo de su propia seguridad.
Un escenario que Jacques Pitteloud arrasa el viernes en La Matinale. El diplomático, cuyos cinco años como embajador en Washington finalizaron este verano, afirma que “Donald Trump no está a punto de hacer implosionar la alianza atlántica”.
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Se insta a los europeos a hacer más
Para Valais, el republicano pretende presionar a los países europeos para que se impliquen más. “Obligará a un cierto número de países a mantener sus compromisos, que de hecho datan de la creación de la alianza: invertir el 2% del producto interior bruto en defensa”.
E incluso: Donald Trump sigue los pasos de sus predecesores. “Todos los presidentes americanos desde el final de la Guerra Fría, incluidos Barack Obama y Bill Clinton, han insistido y dicho -quizás un poco más educadamente- a los miembros de la OTAN que deben mantener sus compromisos”, recuerda Jacques Pitteloud.
Una opinión presidencial que comparten muchos estadounidenses. El embajador cita las palabras de uno de sus amigos, un demócrata, que dijo: “Nos resulta difícil entender por qué 300 millones de estadounidenses deben defender a 550 millones de europeos contra 140 millones de rusos”.
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Un cambio de rumbo en el Viejo Continente
Europa, por su parte, se rearma desde el inicio de la guerra en Ucrania, en una vigilancia roja contra el Kremlin. El diplomático habla incluso de un “despertar brutal” de su industria de materiales de guerra.
“Los presupuestos militares europeos están aumentando espectacularmente. Muchos miembros de la OTAN están alcanzando el fatídico límite del 2%”, subraya Jacques Pitteloud.
“Europa se está dando cuenta de que tal vez no siempre pueda contar con el paraguas estadounidense y que sea cual sea la administración que esté en el poder en Washington, no podemos excluir que su atención se centre sobre todo en el Pacífico, donde se está disputando una gran partida de ajedrez geoestratégico. También se jugó”, analiza.
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Estados Unidos sigue en la cima de la pirámide
Aún así, Europa todavía no está en pie de igualdad con su poderoso aliado del otro lado del Atlántico. “El paraguas nuclear estadounidense es único, no es comparable al paraguas nuclear francés o británico”, afirma.
“Las inversiones de toda Europa en investigación de defensa ascienden por el momento a unos 10.000 millones de euros al año y las de Estados Unidos son unas diez veces mayores”, señala también.
Por lo tanto, el Viejo Continente, incluso si muestra sus músculos, todavía tendrá que depender de los Estados Unidos. “La seguridad de Europa sin los americanos es una ilusión”, considera Jacques Pitteloud.
Comentarios recogidos por Pietro Bugnon
Texto web: Antoine Michel