Argel sueña con abortar la mejora franco-marroquí

Argel sueña con abortar la mejora franco-marroquí
Descriptive text here
-

Hay una certeza incontestable: la próxima primavera franco-marroquí está provocando úlceras en el régimen argelino. Un acercamiento inaceptable para Argel que, sin duda, hará todo lo que esté a su alcance para dinamitarla.

Para el régimen argelino, el acuerdo entre París y Rabat se presenta como un enorme peligro que corre el riesgo de cerrar de una vez por todas el asunto del Sáhara marroquí transformado por Argel en un asunto diplomático. Hoy París da señales de que la diplomacia francesa está a punto de reconocer la soberanía de Marruecos sobre su Sáhara.

Este escenario, cada vez más inevitable a la vista de las recientes visitas francesas a Marruecos y de las declaraciones favorables al Reino, es una auténtica pesadilla para el régimen argelino. Un régimen que había mostrado una susceptibilidad efervescente en una camiseta deportiva, es capaz de cualquier cosa para influir y limitar una decisión francesa.

De ahí que hoy surja esta pregunta: ¿Qué puede hacer este régimen militar argelino para intentar abortar esta mejora entre París y Rabat? ¿Qué cartas valiosas tiene para intentar frenar este acercamiento?

La reciente noticia franco-argelina que evoca la detención en Francia de un influencer argelino, Saïd Bensedira, “refugiado político” en Londres, acusado por ciertos medios de querer fomentar intentos de asesinato contra opositores argelinos con la ayuda y la bendición de los servicios argelinos. .

La leyenda aún no confirmada dice que el diabólico proyecto de estos servicios era cometer estos ataques y achacarlos a Marruecos. La leyenda también dice que fueron los servicios marroquíes los que alertaron a sus homólogos franceses de la inminencia de este paso al acto terrorista. Said Bensedira es, como la mayoría de los opositores argelinos, objeto de controversia. Excluido del territorio argelino y estigmatizando al presidente Abdelmajid Tebboune a través de sus vídeos, difunde no obstante un odio inextinguible contra Marruecos y sus instituciones.

Sembrar el caos y la discordia entre Marruecos y Francia forma parte de los objetivos de Argel para socavar este acercamiento. El hecho de que las informaciones indiquen estas posibles operaciones clandestinas de los servicios argelinos es totalmente creíble teniendo en cuenta la historia de las autoridades argelinas con Francia en el ámbito del terrorismo. Hasta hoy, los servicios argelinos nunca han sido absueltos de las acusaciones en su contra de estar implicados en la oleada terrorista que azotó Francia en los años 1990.

Por lo tanto, la carta terrorista es jugable y totalmente plausible en el arsenal de venganza de un régimen presa del pánico por el giro de los acontecimientos. Igual de plausible es el mapa migratorio que Argel puede activar hacia las costas europeas y cuyo masivo candidato argelino a la inmigración acabará, por razones culturales e históricas familiares, en territorio francés.

En estos días, una mini invasión de Francia por parte de candidatos de inmigración argelinos probablemente ponga en dificultades el gobierno de Emmanuel Macron y allane el camino hacia el poder para sus competidores, particularmente los de extrema derecha.

El régimen argelino podría haber activado la carta económica, especialmente la energética, como ya había hecho con España, salvo que la experiencia fue desafortunada y terminó en desastre. Sobre todo porque estos soldados que gobiernan Argelia tienen demasiados activos e intereses en Francia como para atreverse a iniciar este enfrentamiento.

Esta situación hace temer que la reacción del régimen argelino para intentar envenenar la prometedora relación franco-marroquí se limite a operaciones en la sombra que afectarán al ámbito de la seguridad y a la manipulación mediática.

En realidad, estas reacciones argelinas no sorprenden a las autoridades francesas. Su largo silencio sobre el Sahara, sus múltiples vacilaciones a la hora de dar el paso del reconocimiento, fueron ya fruto de esta limitación argelina.

Al tomar la decisión estratégica de abrirse a Marruecos, Francia sabía que crearía un adversario incontrolable en Argel. Un adversario que habrá que manejar tanto con pinzas diplomáticas como con firmeza política que impida actitudes irresponsables como jugar con la seguridad de los franceses, ya sea en sus territorios o en el extranjero.

-

NEXT La policía expulsa a manifestantes pro palestinos de la Universidad de Columbia.