Alentados por el regreso de los laboristas a Downing Street, varios centenares de británicos se manifestaron el sábado en Londres para exigir el regreso del Reino Unido a la Unión Europea, casi cinco años después del “desastre monumental” del Brexit.
A media tarde, un mar de eurófilos vestidos con los colores azul y amarillo de la UE llenó la plaza del Parlamento al son de la “Oda a la Alegría” de Beethoven, considerada el himno europeo, tras haber desfilado desde Hyde Park, en el centro de Londres.
En la plaza donde se vinculaban las intervenciones en la plataforma, muchos portaban carteles que decían “Quiero recuperar mi libertad de movimiento” o “El Brexit es un desastre monumental”. Otros mostraban un mensaje “¿A dónde se fue el dinero?” pegatina en sus camisetas, en referencia a la engañosa promesa del ex primer ministro Boris Johnson (2019-2022), quien insistió en que el Reino Unido se quedaría con “350 millones de libras” semanales para financiar sus servicios públicos en lugar de dárselos. a la UE.
“El Brexit fue una trampa tendida al pueblo británico por las mentiras que se dijeron”, lamentó Alec Taylor, de 71 años, que trabaja en el sector de seguros y vestía una boina azul cosida con estrellas doradas. Alec Taylor estimó que el Reino Unido no volverá a unirse a la Unión Europea en el corto plazo, pero que el gobierno laborista elegido en julio será “ya más abierto, educado y amigable con Europa”, y tal vez traerá, aquí dentro de unos años, la idea de reintegración.
El primer ministro británico, Keir Starmerelegido el pasado mes de julio, se reunirá la próxima semana en Bruselas con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, con el objetivo de relanzar las relaciones entre el Reino Unido y la UE. Casi cinco años después del Brexit. El líder laborista, sin embargo, descartó unirse al mercado único europeo, a la unión aduanera o al tratado sobre la libre circulación de personas.
“Quizás exista una posibilidad de revertir este error (del Brexit) con el nuevo gobierno”, declaró Saskia Huc-Hepher, una académica de 50 años que acudió a manifestarse, lamentando que se mostró reticente a crear un sistema de movilidad para jóvenes. Esta británica que vive en Londres está casada con un francés. “El Brexit nos complica mucho la vida (…) Tenemos dos hijos y es un poco difícil construir una identidad familiar” en estas condiciones, subrayó.