La policía australiana se justificó el miércoles por haber calificado de “terrorista” el apuñalamiento de un obispo por un joven de 16 años en una iglesia de Sydney, subrayando que habían seguido criterios legales.
PIEDRA CLAVE
El obispo Mar Mari Emmanuel fue apuñalado durante un sermón transmitido en vivo en una iglesia asiria en un suburbio de Sydney el lunes. Los religiosos y varias personas más fueron hospitalizados sin que sus vidas corriesen peligro y el joven agresor fue detenido.
La comisionada de policía de Nueva Gales del Sur, Karen Webb, dijo el miércoles que había calificado el ataque de “terrorista” horas después del ataque, en estricto cumplimiento de la ley estatal.
Una ley de 2002 establece que un acto terrorista es aquel que daña a una persona, está motivado por una causa política, religiosa o ideológica y tiene como objetivo intimidar al público.
“Hice esta declaración sin dudarlo”, dijo a ABC, afirmando que entendía las preguntas de los representantes de las comunidades religiosas sobre este tema.
Disturbio
La calificación de “terrorismo” no significa que el adolescente será acusado de terrorismo, aclaró.
Tras esta calificación, se abrió una investigación en la que participaron la policía estatal, la policía federal y los servicios de inteligencia.
Un líder de la comunidad musulmana de Sydney dijo que la policía pudo haber “ido demasiado rápido” al calificar el ataque de terrorismo.
Después del ataque, estalló un motín fuera de la iglesia, y cientos de fieles y miembros de la comunidad expresaron su enojo.
El adolescente estaba siendo tratado en un hospital de Sydney el miércoles y podría permanecer allí varios días más.
ETA
