Evocando en el acusado principal, de 71 años, una “personalidad estructurada de manera perversa”, el magistrado estimó que buscaba “el propio placer” a través de “la sumisión, la humillación e incluso el envilecimiento de su esposa”.
Dominique Pelicot, que nunca ocultó su responsabilidad, calificándose de “violador”, pareció sin embargo conmovido por la sentencia impuesta contra él. “Está abatido, nunca es fácil para un hombre escuchar que se le exige una pena de 20 años”, declaró su abogada, la señora Béatrice Zavarro, durante un receso de la audiencia.
Respecto a Caroline, hija del matrimonio Pelicot, convencida de haber sido también víctima de violación o de agresión sexual por parte del hombre al que sólo llama “progenitor”, Laure Chabaud estimó que si “la justicia no pretende dejar víctima al margen”, no se ha encontrado ningún elemento que permita a estos “sufrimientos encontrar una traducción jurídica”.
– Después de Gisèle Halimi, Gisèle Pelicot –
Al abrir el auto de procesamiento el lunes por la mañana, Jean-François Mayet, fiscal adjunto de Aviñón, estimó que “la cuestión” de este proceso “no es una condena o una absolución”, sino “cambiar fundamentalmente las relaciones entre hombres y mujeres”.
Esta cuestión de la “dominación masculina sobre las mujeres” es un tema “lejos de ser desconocido para todos”, recordó, estableciendo un paralelo con el proceso por violación de Aix-en-Provence de 1978, en el que otra Gisèle, la abogada Gisèle Halimi, fue acusada de violación. reconocido como delito.
Casualmente, el inicio de esta acusación coincidió con el día internacional de la lucha contra la violencia contra las mujeres, “un símbolo más” señaló Antoine Camus, uno de los dos abogados de las partes civiles.
Y estas requisas fueron examinadas de cerca cuando la principal víctima, Gisèle Pelicot, de 71 años, alcanzó el estatus de icono feminista tras negarse a permitir que el juicio se desarrollara a puerta cerrada, “para que la vergüenza cambie de bando”, y como el eco de esto. El juicio, cubierto casi universalmente por 138 medios de comunicación acreditados, entre ellos 57 extranjeros, ha traspasado las fronteras de Francia.
“Es mucha emoción”, dijo Pelicot el lunes por la mañana, una vez más muy aplaudida a su llegada a la corte.
Tras abordar el caso de Dominique Pelicot, la fiscalía solicitó una pena de prisión de 17 años contra Jean-Pierre M., el único acusado no procesado por agresión sexual a Gisèle Pelicot sino a su propia esposa.
Luego, antes de empezar a abordar por la tarde los otros 49 casos individuales de este proceso extraordinario, Laure Chabaud desmintió preventivamente los argumentos de la defensa, rechazando el supuesto “consentimiento implícito” o “consentimiento por poder” que habría dado la señora Pelicot: “Ya no podemos, en 2024, decir ‘como ella no dijo nada, estuvo de acuerdo’, es de otra época”.
¿Podrían los coacusados creer legítimamente que estaban participando en el escenario de una pareja libertina, donde la esposa fingía estar durmiendo? ¿Fueron “manipulados” por Dominique Pelicot? ¿Se vio perjudicado su discernimiento en el momento de los hechos, como sugirieron el miércoles los abogados de 33 de ellos?
No, respondió el magistrado, señalando en particular que “si los vídeos muestran cierta insistencia, no se percibe ninguna presión, ningún chantaje, ninguna amenaza”. En cuanto al estado físico de Pelicot, “inerte” en los vídeos, es “particularmente llamativo”, subrayó, y no deja dudas sobre su incapacidad para dar su consentimiento a nada.
– “De matices” –
Si la mayoría de los acusados son procesados por los mismos hechos, a saber, la violación agravada de Gisèle Pelicot, y por tanto también corren el riesgo de ser condenados a 20 años de prisión, la individualización de las penas es obligatoria. Y la fiscalía sin duda debería distinguir a los reincidentes (diez hombres vinieron varias veces) de los que vinieron sólo una vez a Mazan.
“Es necesario que haya matices en las sentencias, eso sólo lo entenderemos siguiendo el juicio”, dijo a la AFP Brigitte Jossien, de 74 años, gerente de tienda jubilada, que llegó el lunes a las 05:45 para asistir al juicio.
Para los colectivos feministas que colocaron una pancarta en las murallas frente al tribunal, la petición era muy clara: “20 años para todos”.
En principio, la acusación está prevista para tres días, pero podría finalizar el miércoles por la mañana. Inmediatamente se dará la palabra a los abogados defensores.
La abogada de Dominique Pelicot, Béatrice Zavarro, abrirá el baile. Luego sus colegas se sucederán hasta el 13 de diciembre, y se espera el veredicto a más tardar el 20 de diciembre.
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