Fútbol de Argelia– Walid Regragui, entrenador de la selección marroquí, inició una nueva gira por Europa. El objetivo de este viaje es doble: seguir las actuaciones de los jugadores marroquíes que juegan en el Viejo Continente e intentar convencer a jóvenes talentos binacionales para que se unan a los Atlas Lions.
Este acercamiento, que se ha convertido en un hábito para el técnico marroquí, atestigua su implicación en el desarrollo de las diferentes selecciones marroquíes. Como supervisor general de las selecciones nacionales, Regragui pretende reforzar la selección olímpica y garantizar el relevo generacional de la selección A.
Durante esta gira, Regragui y su adjunto, Rachid Benmahmoud, partirán en Francia. Según fuentes cercanas a la dirección marroquí, está prevista una reunión con Ayoub Bouaddi, jugador del LOSC Lille y convocado habitualmente con la selección francesa sub-20. Este joven centrocampista es actualmente objeto de un enfrentamiento entre las federaciones marroquí y francesa, cada una de las cuales desea integrarlo en su programa deportivo.
Otra parada clave de esta gira será el encuentro con Ugo Mathis Kademeri, apodado “el Haaland marroquí” por su parecido físico y su estilo de juego con la estrella noruega Erling Haaland. Con 17 años, Kademeri ya brilla en el Olympique de Marsella y genera grandes esperanzas para el futuro del fútbol marroquí.
A pesar de estas prometedoras iniciativas, Regragui enfrenta importantes desafíos. La abundancia de talento marroquí en Europa complica la selección de jugadores en cada reunión, provocando en ocasiones críticas o malentendidos. Algunos ciudadanos con doble nacionalidad, frustrados por no haber sido seleccionados, amenazan con favorecer otras selecciones nacionales.
Regragui, fiel a sus principios, rechaza firmemente cualquier intento de presión. “Nunca aceptaré que me sometan a un ultimátum”, declaró recientemente, subrayando la importancia del compromiso sincero de los jugadores con la camiseta marroquí.
Esta gira forma parte de una ambiciosa estrategia para asegurar el futuro de los Atlas Lions y consolidar su estatus entre las grandes naciones del fútbol africano y mundial.
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