Decir que este Barça depende de un jugador de 17 años sería un poco exagerado, pero la reunión de esta tarde al menos nos ha permitido medir con un poco más de precisión su influencia y su impacto en este equipo, sencillamente irreemplazable ( El Barça ha perdido 8 puntos esta temporada, cada vez que Yamal no jugó). Ya ausente en la derrota de los azulgranas ante la Real Sociedad (0-1) hace trece días por una lesión en el tobillo, Lamine Yamal, su desenfado y sus destellos, volvieron a ser echados de menos por este equipo barcelonista, esta vez ante el Celta de Vigo. Afortunadamente, Raphinha todavía no parece decidido a bajar de su pequeña nube y, como tantas veces desde agosto, el brasileño llevó a su equipo, hasta arruinarlo todo en cinco minutos (2-2). Sin embargo, a partir del minuto 15 de juego, el ex Rennais puso a su equipo en órbita. Ridiculizó a Mingueza, culpable de un grave error de interpretación en un pase de Koundé, y ajustó a Guaita con la zurda (0-1).
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El capitán catalán confirmó una impresión general desde el inicio de la temporada en España: la de un jugador en su apogeo, que lo consigue todo, y hoy entre los mejores del mundo en su posición. Decimos “en su posición”, porque el brasileño tampoco puede hacerlo todo, como defender en lugar de Gerard Martín. Instalado esta tarde en el lateral izquierdo, el jugador formado en la Masia deambuló durante mucho tiempo como un alma en pena en este encuentro. Pudo (debería) haberle costado a su equipo un penalti por una intervención de un jugador en el minuto 27, y luego ser expulsado por una segunda tarjeta amarilla por esta entrada violenta a Aspas, loco de rabia contra el árbitro (43). Con las múltiples paradas de Peña, como esta potente volea de Moriba (19º), el español tenía muchos otros motivos para mostrar su frustración…
El Barça lo arruinó todo
Del lado catalán, Lewandowski también pudo reflexionar sobre su trabajo en el minuto 41, es decir, un balón en picado del que sólo él tiene el secreto para engañar a Guaita, pero su gol fue anulado por fuera de juego. Fue también la mayor situación catalana de este primer acto, aunque precedió a otro intento, esta vez de Olmo -muy discreto-, pero capturado por Guaita. Ver al Celta aguantar en el descanso al mejor equipo de Europa no habría tenido la apariencia de un atraco que se le habría podido atribuir en la previa al partido. Flick era consciente de ello y, para evitar otro accidente, le hizo un favor al pobre Martin, equivocándose, reemplazándolo por Fort. Por el contrario, Mingueza todavía tenía ventaja en Tenerife, donde cinco días antes se había enfrentado a Suiza en la selección, ya que el internacional español ofreció un nuevo gol a su antiguo equipo.
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Perdió un balón peligroso en beneficio de Raphinha, que encontró a un Lewandowski clínico en el ritmo adecuado (61º, 0-2). Un gol número 15 en 14 partidos para consolidar aún más su dominio en el ranking de goleadores de la Liga, que el polaco domina por delante de un tal Raphinha, autor de 6 goles. El brasileño también estuvo cerca de su 7º con un saque de Olmo, pero su intento se estrelló consecutivamente en el palo, luego en Guaita (78º), lo que coincidiría con el desplome de los culés y la demoledora expulsión de Casado en el minuto 82. Si Peña estuvo impecable frente a Álvarez (68°), luego Borja Iglesias (79°), de hecho doblegó a González (84°), tras un desagradable error técnico de Jules Koundé, demasiado indeciso frente a su superficie (84°, 1- 2). Dos minutos después, el Barça volvió a sabotearse. Esta vez le tocó a Álvarez (86º, 2-2) hacer miserable a Fort en el lateral, y ajustar a Peña para aguarle la fiesta al Barça. En la clasificación, los de Flick siguen líderes con cinco puntos de ventaja sobre el Atlético, y siete sobre la Real, que tiene dos partidos menos. El Celta es 11º.
Pub. el 23/11/2024 22:58
– ACTUALIZAR 23/11/2024 23:17
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