El choque de la Liga de Campeones entre el Club Brugge y el Aston Villa produjo un incidente inusual que ha generado mucho revuelo en las redes sociales.
Es algo raro en el mundo del fútbol lo que ocurrió en el estadio Jan Breydel. En el minuto 50 de la segunda parte del partido de Liga de Campeones, las cámaras de televisión centraron su atención en el árbitro Tobias Stieler, que pitó un penalti que nadie que había visto en directo se había percatado y ninguno de los jugadores del conjunto de Unai Emery se dio cuenta. . La expresión del rostro de Emiliano Martínez lo decía todo.
Las repeticiones aclararon la confusión que rodeó el incidente en el campo. Mostró cómo el portero argentino colocó el balón en el área chica para ejecutar un saque de meta. Lo que ciertamente no había anticipado era que su compañero de equipo, Tyrone Mings, tocaría inocentemente el balón, pensando que estaba fuera de juego. El árbitro fue el único en el estadio que vio esta infracción, que sancionó con un penalti para el equipo local.
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Un giro inesperado de los acontecimientos llevó al equipo belga a tomar ventaja después de que Hans Vanaken convirtió un penalti. Como era de esperarse, esta ridícula sanción se ha vuelto viral en las redes sociales, quedando la mayoría de usuarios incrédulos ante lo que habían presenciado.
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