5.000 soldados y 5.000 policías
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció el sábado el envío de 5.000 soldados y 5.000 policías y gendarmes adicionales para ayudar a los habitantes del sureste del país, asolado por dramáticas inundaciones.
En total, se desplegarán “5.000 soldados adicionales” “en las próximas horas” para ayudar a los residentes de las zonas de desastre, dijo Sánchez. A estos militares se sumarán “5.000 policías y guardias civiles adicionales (equivalentes a los gendarmes en España, nota del editor).
Número indeterminado de desaparecidos
Pero este número de víctimas podría aumentar aún más, ya que todavía se busca a muchas personas desaparecidas, particularmente entre los cadáveres de automóviles volcados por las furiosas olas, que ensucian los estacionamientos y las calles.
El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, aseguró el viernes por la noche que todavía no había una cifra oficial sobre los desaparecidos, mientras los vecinos sin noticias de sus seres queridos aumentaban sus llamadas de auxilio en las redes sociales.
“Sería imprudente dar una cifra”, confirmó el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la cadena de televisión Antena 3. Sin embargo, “es probable, dadas las circunstancias y la opinión de los expertos […] que habrá más muertes”, afirmó.
Reabrir los caminos
Una de las prioridades del ejército, además de la búsqueda de los desaparecidos, es reabrir las carreteras para permitir la entrega de ayuda, en particular alimentos, retirando los vehículos y los escombros que impiden la circulación, y restablecer el orden en los municipios afectados.
Desde las inundaciones, ocurridas durante la noche del martes al miércoles, las autoridades han constatado actos de saqueos y robos. La policía anunció que ya había detenido a varias decenas de personas, varias de las cuales estaban en prisión preventiva.
Problemas de comunicación
“Ayer llevamos toneladas de comida y agua a los municipios más afectados”, aseguró Susana Camarero, vicepresidenta de la Comunidad Valenciana, reconociendo que las operaciones se vieron obstaculizadas por el estado de las infraestructuras. “Muchos pueblos quedaron aislados y llamamos a los ayuntamientos para saber qué necesitaban, pero no había teléfonos”, recordó, mientras miles de personas siguen sin comunicaciones.
Solidaridad
“La ayuda es insuficiente. Afortunadamente España sabe ser solidaria”, afirmó Alicia Izquierdo, que acudió el viernes a llevar dos carros llenos de comida junto a su hermana Marta a casa de su hermano en Paiporta, un pueblo de más de 25.000 habitantes donde se identificaron al menos 62 muertos. .
El viernes, el número de voluntarios fue tal que las autoridades pidieron a los vecinos que se desplazaban en coche a las comunidades afectadas que se quedaran en sus casas, para no obstruir las carreteras e impedir el paso de la ayuda.
Alerta naranja mantenida este sábado
Related News :