La noticia de que Vinicius Jr no será el próximo Balón de Oro cayó como un jarro de agua fría en el seno del Real Madrid. El cabreo en el conjunto blanco provocó, entre otras cosas, la cancelación del viaje previsto a París.
Un viaje que, a pesar de saber que no se llevaría el premio, Vinicius quería realizar. El brasileño tenía claro que era el momento de dar la cara, a pesar de que el galardón terminara en manos de Rodri y él tuviera que conformarse con un amargo segundo puesto.
El extremo del Madrid creía que debía ser el ganador del premio, pero en ningún caso quería esconderse por no serlo. A pesar de sus intenciones iniciales, Florentino Pérez dejó las cosas claras una vez fue conocedor de la noticia.
El presidente del Real Madrid prohibió que cualquier representante del club viajara a París. Ni a nivel individual, ni como una delegación oficial, no habría representación blanca en el Teatro du Châtelet.
La mano de la UEFA
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En el equipo de la capital española existe la sensación de que la UEFA, que forma parte de la organización del trofeo, está detrás de todo esto, con motivo del conflicto entre ambos por la Superliga.
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Para el Madrid es un tema institucional y de imagen, pero también comercial. Había varias campañas firmadas que, tras la noticia de que Vinicius no será Balón de Oro, no podrán llevarse a cabo.
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