El Papa Francisco fue duramente interrogado el sábado por estudiantes sobre la cuestión de la igualdad de género y el lugar de la mujer en la Iglesia católica, pero su respuesta suscitó decepción e incomprensión, incluso en la universidad belga que lo acogió.
En el segundo día de su visita a Bélgica, el pontífice argentino tenía previsto un intercambio en la universidad católica francófona de Lovaina la Nueva (UCL), sobre el tema de la ecología y la crisis climática.
Una oportunidad aprovechada por estudiantes y profesores para cuestionar también la justicia social y la pobreza, “mayoritariamente femenina” debido al “sistema de dominación” que ofrece a los hombres los papeles protagonistas en la sociedad. Y a fortiori en la Iglesia.
“La invisibilidad de las mujeres (…) tiene consecuencias en la forma en que vivimos la transición ecológica”, proclamaron en un texto leído en público ante varios centenares de estudiantes y miembros del personal académico y universitario.
“El llamado al desarrollo integral nos parece incompatible con las posiciones sobre la homosexualidad y con el lugar de la mujer en la Iglesia católica”, agregaron.
“La Iglesia es una mujer”, respondió Francisco. “Lo que caracteriza a las mujeres, lo que es femenino, no está determinado por consensos o ideologías”, prosiguió, sin abordar cuáles podrían ser las evoluciones concretas sobre el lugar de las mujeres en la Iglesia. .
Inmediatamente después de este intercambio, la UC de Lovaina publicó un comunicado de prensa expresando su “incomprensión” y su “desaprobación”. Afirmar, como hizo el Papa, que las mujeres son “fértiles acogida, cuidados, devoción vital” es “una posición reduccionista”, criticó la universidad, que quiere ser “inclusiva” y opuesta al sexismo.
Valentine Hendrix, que cursa una maestría en relaciones internacionales en la UCL, dijo que estaba “extremadamente decepcionada” por los comentarios del Papa. “Realmente nos dejó al margen, estamos realmente impactados por lo que dijo sobre el papel de la mujer en la sociedad: tenemos un rol fértil, conyugal, maternal, hoy es exactamente todo de lo que queremos liberarnos”, lamentó la Estudiante de 22 años.
Una decepción compartida por el climatólogo Jean-Pascal Van Ypersele, figura de la universidad católica francófona. El Papa “no estuvo a la altura”, según él. “Responder ‘La Iglesia es una mujer’ es perder por completo el meollo de la pregunta”.
– Polémico homenaje al rey Balduino –
Desde su elección en 2013, el Papa argentino ha insistido en el lugar otorgado a las mujeres, aumentando por ejemplo el número de nombramientos para puestos de responsabilidad en la Curia, el gobierno central de la Santa Sede. Pero las asociaciones lo critican por no hacer lo suficiente en este sentido, en particular negándose a abrir el camino al diaconado femenino.
Este intercambio en Bélgica tuvo lugar pocos días antes de la apertura en el Vaticano de la Asamblea general del Sínodo sobre el futuro de la Iglesia, un vasto proyecto del Papa que se centra en particular en el lugar de la mujer en la Iglesia.
Ya el viernes, Luc Sels, rector de la KU Leuven, la contraparte flamenca de la Universidad Católica de Lovaina, había planteado ante el Papa la “gran diferencia entre hombres y mujeres en la Iglesia”, que sin embargo “de facto es muy frecuente”. apoyado por mujeres.
“¿No sería más cálida la Iglesia si se concediera un lugar más importante a las mujeres también en el sacerdocio?” preguntó. Una pregunta a la que François no respondió.
El sábado, el Papa desató otra polémica al desviarse de su programa oficial para inclinarse en Bruselas ante la tumba del ex soberano belga Balduino (1951-1993), cuyo “coraje” elogió por haberse opuesto en 1990 a la “ley asesina”. ”sobre el aborto.
El palacio real belga aclaró que el rey Felipe, sobrino de Balduino, y su esposa Mathilde acompañaron al Papa, “por cortesía”, durante esta “visita improvisada” y de “carácter estrictamente privado” a la cripta real de Laeken. Una manera de distanciarse del gesto de François.
Al llegar el jueves por la tarde a Bélgica, el Papa concluirá su visita el domingo con una misa mayor en el estadio Rey Balduino de Bruselas, donde se esperan más de 35.000 fieles.
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