Donald Trump y Volodymyr Zelensky se reunieron el sábado en París con Emmanuel Macron para una reunión tripartita en el Elíseo. Una reunión de unos 35 minutos, en inglés y sin traductor, que resultó “fructífera”.
Una foto histórica en el Elíseo con Donald Trump y Volodymyr Zelensky. En el centro: Emmanuel Macron, que intenta erigirse en mediador. Lo que inicialmente se anunció como una sucesión de entrevistas bilaterales, con Donald Trump y luego con Volodymyr Zelensky, finalmente se transformó en una reunión tripartita de unos 35 minutos, en el secreto del salón dorado del Elíseo, en inglés y sin traductor.
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Una conversación “fructífera”
En medio de una crisis política interna, Emmanuel Macron está tomando un respiro diplomático. Disfrazado de mediador, permitió que Volodymyr Zelensky defendiera su caso contra Donald Trump. “Este encuentro fue posible gracias a la relación de confianza entre el presidente electo estadounidense y el presidente francés”, asegura un diplomático que habla de “una conversación fructífera” y una “ganancia real para los ucranianos”.
Zelensky está listo para hacer concesiones
Queda por ver si es probable que sus intercambios cambien la posición de Donald Trump. Ha dicho varias veces que ya no quiere gastar miles de millones de dólares para ayudar a Kiev e incluso quiere presionar al presidente ucraniano para que negocie con Vladimir Putin para poner fin al conflicto.
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Volodymyr Zelensky ya no rechaza del todo esta idea, pero fija sus condiciones y exige sobre todo garantías de seguridad, en particular la membresía en la OTAN para intentar impedir cualquier nueva ofensiva rusa. Sin embargo, a diferencia de París, Washington hasta ahora se ha mostrado muy reticente al respecto.
