A dos días del final de la COP29 en Bakú, este es un ejemplo concreto de las consecuencias del cambio climático: las islas están condenadas a desaparecer.
Como el de Nyangai, frente a las costas de Sierra Leona.
Mire este informe edificante de TF1 News.
Sigue la cobertura completa
La 1 p.m.
Tras cinco horas de navegación desde Freetown, capital de Sierra Leona, se alza la isla de Nyangai, o al menos lo que queda de ella. Porque cada año, este pedacito de tierra desaparece bajo el agua a una velocidad alarmante debido al calentamiento global. A principios de la década de 2010, la isla tenía 700 metros de largo. Siete años después, fue cortado en dos y el bosque desapareció. Hoy en día, una decena de árboles siguen resistiendo la erosión, como podemos ver en las fotos siguientes, pero ¿por cuánto tiempo?
Los pescadores aprovechan la marea baja para jugar al fútbol. Esto representa dos breves horas de respiro al día antes del implacable regreso del agua. Al día siguiente, el campo de fútbol desapareció. Como resultado, sólo unas pocas familias de pescadores todavía se aferran a su paraíso. Además, la población se ha dividido por diez. Sólo quedan 400 personas viviendo en Nyangai.
Si dentro de un año sigo vivo, me iré.
Charlie Kpana, residente de Nyangai
Charlie Kpana es uno de los ancianos de la aldea. “Nací aquí en 1958”dijo en el informe TF1 que se encuentra al principio de este artículo. A los 66 años vio su isla atacada por el océano Atlántico. Su casa incluso fue destruida por el agua en varias ocasiones. Agotado, debe decidir irse con sus seis hijos. “Aún no he encontrado un lugar donde ir con mi familia. Pero tengo que pensarlo ahora. Si dentro de un año sigo vivo, me iré”.asegura.
Un dolor de cabeza para él y para los demás residentes, porque Nyangai ha sido durante mucho tiempo un remanso de paz, salvado de la guerra civil en el país a principios de la década de 2000 y de la epidemia de ébola hace diez años. Los aldeanos tienen acceso a la electricidad. Incluso había agua dulce antes de que el océano inundara el único pozo. Hoy en día, el agua es salobre y se utiliza únicamente para las tareas domésticas. “Es difícil salir de aquí. Lo tenemos todo y ahora voy a tener que empezar de cero y no tengo dinero”se lamenta Lucy, una residente. Allí incluso hay una escuela, pero se ha inundado varias veces y también está amenazada.
-
Leer también
El año 2024 debería superar los 1,5°C de calentamiento, una novedad en la historia
Los habitantes lo saben, su isla está condenada, pero Nyangai no es un caso aislado. Cada año, casi 20 millones de personas son desplazadas en todo el mundo debido a desastres naturales relacionados con el clima.