La derrota ante Osasuna hizo mucho daño, tanto a la afición como a los jugadores, así lo hacía saber Remira: “Un palo duro. No conseguimos estar como lo hacemos fuera de casa. Ahora toca corregir, será un proceso largo, bonito, duro y difícil, pero que nos hará mejores, estoy seguro”, decía.
El de Cascante fue autocrítico con la labor defensiva de su equipo: “En el primer tiempo no hemos estado bien en las transiciones, no hemos ajustado para nada bien, no hemos parado sus contras ni haciendo falta ni estando encima”. Sobre el primer gol, también asumía el error de la Real: “Hemos defendido mal el primer córner. Prácticamente sacan un centro de la nada; si te rematan haciendo una pared, está mal defendido”, reprochaba.
En cuanto al segundo gol, entendía que el tanto visitante llegó debido a un desajuste defensivo: “Es una transición en la que no cogemos bien las referencias atrás cuando estamos atacando, quizás por el ímpetu de querer empatar rápidamente. Al final, no defendemos bien y nos pillan”, comentaba el guardameta.
Remira volvía a insistir en que la primera mitad dejó mucho que desear: “La primera parte no pude pasar. Dejamos las transiciones a ellos, que son rápidos. Si no estás atento a las referencias de la gente que se queda libre atrás y no paramos las contras, te generan peligro. Toca corregir eso y mejorar, porque nos pueden pillar así todos”.
Al portero le empezaba a cansar el tema de los malos resultados ante su afición: “No ganar siempre es preocupante, y en casa, más aún. Pero el equipo trabaja y cree hasta que llegamos a casa… Yo confío en cómo trabajamos, en los jugadores que tenemos y en la rabia que mostramos fuera. Quizás es algo mental, y no puede ser; tenemos que ser más maduros en este aspecto”, hablaba al respecto de la mala racha de la Real en Anoeta.
