Al timón
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Los vídeos y fotografías insoportables de la violencia sufrida por Gisèle Pelicot ya no serán difundidos sistemáticamente, anunció el viernes el presidente del tribunal. Una decisión que genera polémica, ya que la víctima y el fiscal general querían publicidad.
Quería un juicio a la luz, que nadie pudiera ignorar la existencia de la sumisión química y las decenas de violaciones sufridas. “La vergüenza debe cambiar de bando” Gisèle Pelicot ha sido duramente criticada al negarse a que el juicio de su exmarido, Dominique Pelicot, y de sus 50 coacusados se celebre a puerta cerrada. Sin embargo, tras tres semanas de audiencias, el presidente del tribunal penal departamental de Vaucluse decidió finalmente este viernes 20 de septiembre ocultar una parte de los debates. Los vídeos y las fotos de los hechos no se difundirán sistemáticamente, como pidió el fiscal general, Jean-François Mayet, apoyado por la parte civil. Y cuando lo hagan, se volverá a pedir al público que abandone la sala, esta vez acompañado de todos los periodistas acreditados. Al final de la audiencia, Stéphane Babonne