lo esencial
En el nuevo espectáculo que presentará el martes 3 y miércoles 4 de diciembre en el Casino Barrière, Nora Hamzawi nos invita a la “ligereza a toda costa”. Entrevista.
La Dépêche du Midi: En tu anterior monólogo hablaste mucho de parejas y de sexo. ¿Con qué nos vas a hacer reír esta vez?
Nora Hamzawi: La pareja es mi laboratorio favorito. Es un tema que siempre me ha interesado. Me gusta usarlo como motor de comedia. En mis programas se habla mucho de mi privacidad, mi vida pasa por el filtro del humor. Creé mi doble cómico. Pero mi verdadera vida de pareja, mi familia, es mi jardín secreto. El hilo conductor de esta exposición es sobre todo la búsqueda de la ligereza a toda costa, la urgencia de aprovecharla en un clima que me resulta bastante inquietante. Y ahora que tengo 40 sé que a priori no voy a mejorar, así que mejor aprovecho ahora.
¿Te oprimen las noticias?
Sí, pero no quiero hablar de ello de frente en el escenario. Más que los hechos, lo que me interesa son las emociones y cómo el clima ambiental nos transforma íntimamente, cómo cambia nuestra libido, cómo educamos a nuestros hijos… ¡También me divierte la gente que se queja todo el tiempo!
Recientemente, en el plató de Quotidien, el programa en el que era columnista, dijo que para su 40 cumpleaños se había comprado botas hasta los muslos…
Sabes, he estado en una relación durante 15 años, ¡así que si tuviera que usar botas hasta los muslos! Pero es verdad, realmente compré algunos en ese momento, porque siento que asumo más responsabilidad sobre mí misma como mujer. Entonces, obviamente, con un par de botas hasta los muslos, tengo más confianza en mí mismo, me siento más deseable, menos esperando a los demás. Dicho esto, no los uso en el escenario.
¿Qué relación tienes con tu audiencia?
Me estoy divirtiendo cada vez más. Soy muy buen oyente. El otro día, un chico de la primera fila golpeaba el suelo con sus zapatos, hacía ruido, así que hablé con él e improvisé. Siempre suceden cosas en la sala que hacen que el espectáculo sea único cada vez. De hecho, para mí el escenario es una cámara de descompresión. Es un privilegio poder aislarme del mundo durante una hora y media, en una especie de burbuja, en una relación humana que me aporta mucho consuelo. Tengo un vínculo muy dulce con los espectadores, nos hacemos bien.
Fueron necesarios unos diez años, pero tu carrera cómica realmente despegó. Las dos veladas en el Casino están casi agotadas y del 14 al 18 de marzo estarás en el Olympia. ¡Consagración!
Sí, será divertido ver mi nombre en rojo en la fachada de esta sala legendaria. Pero tuve tiempo de ver venir el éxito, así que lo abordo con cautela. Por el momento, estoy muy feliz de estar de gira y tocar en Toulouse. He venido varias veces y siempre ha sido muy feliz. Me dieron muchas direcciones de restaurantes. Me encantan los after-shows, en general estoy en muy buena forma, es la adrenalina. Imposible acostarse inmediatamente.