Christine Bravo advirtió, durante el cabezas grandes en RTL el 7 de noviembre, que sería operada de la espalda al día siguiente (www.20minutos.fr/sante/3148303-20211222-mal-dos-pourquoi-indispensable-bouger-choisir-bon-fauteuil). Una operación importante, por la que sigue hospitalizada, según testificó en su cuenta de Instagram, tres días después, y el dolor es intenso.
“En comparación con esto, el acuartelamiento de Ravaillac era un placer”, bromea el ex presentador de Bajo las enaguas de la Historia en su publicación de Instagram.
Y sin eufemismos, escribe Christine Bravo en este mensaje titulado Bobo Time : “¿Te duele?” NO, es simplemente HORRIBLE”.
Intenté todo
Reflexionando sobre la condición humana, ella, que vio el estoicismo de sus animales favoritos (las cabras, un perro) ante el sufrimiento, admite sentirse “patética”. Sin embargo, esta vez, y esperamos, esta operación debería poner fin a “un año” de sufrimiento.
La conductora también lo mencionó en mayo en Instagram. Sufría de dolor lumbar. Una “enfermedad del disco” (una afección de la columna), pero fue tratada “por una hernia de disco”.
“Estaba acostada en la cama sin parar”, explicó.
Después de probar analgésicos e infiltraciones, incluso probó el infernal corsé de metal hecho a medida que supuestamente aliviaría su dolor. Si no especifica que la gimnasia formaba parte del programa desplegado para ayudarla, Christine Bravo envió de nuevo a las cuerdas a Arielle Dombasle, presente durante el programa en RTL, quien le sugirió “hacer gimnasia” en lugar de optar por la cirugía.
“Cuando me ven, me ven alegre, porque estoy totalmente drogada”, dijo Christine Bravo, antes de animar a las personas de su caso a “operarse en lugar de hacer infiltraciones, gimnasia… y sufrir y dejar que esto se prolongue”.
Así que, en lugar de abusar de los analgésicos, la integrante de Les Grosses Têtes, de 68 años, optó por “atornillarle las vértebras, como se hace en los viocs”, advirtió con un poco de humor irritante. En Instagram, el 11 de noviembre, detalló la intervención, sin filtro. “Acaban de atornillar 2 estacas de titanio entre 2 vértebras, a nivel L4/L5. Se llama artrodesis”, explicó la exprofesora.
La convalecencia, que requiere una inmovilidad total, dura un mes. Pero Christine Bravo mantiene la esperanza: “Al final dejaré el hospital, ¿verdad? » concluyó. Y podrá volver a Córcega, a su casa, con su marido… y sus animales.