El resto después del anuncio.
El año pasado, Clarisse Crémer habló, sin filtro, de las dificultades relacionadas con el nacimiento de su hija, una de las mejores navegantes francesas. “A principios de febrero, tenía un bebé de dos meses y tenía más planes… Durante varios días, incluso varias semanas, había renunciado a la Vendée Globe 2024. Estaba cansada, muy preocupada”le explicó a parisinoacusando a su patrocinador financiero en el momento de haber rescindido su contrato por su maternidad: “En aquel momento, sin patrocinador y sin barco, tenía la impresión de estar al pie de una montaña y me costaba imaginar que fuera posible”.
Más de un año después de esta entrevista, el sueño de Clarisse Crémer está a punto de hacerse realidad mientras la regatista se prepara para zarpar la Vendée Globe este domingo 10 de noviembre. Una salida un tanto especial, ya que ella y su compañero, Tanguy Le Turquais, se embarcarán en esta carrera que durará unos 90 días. Por lo tanto, era necesario prepararse para este momento con mucha antelación y los dos tortolitos lo han estado preparando durante 18 meses, como le confiaron a la parisino este viernes 8 de noviembre. Para ello, los dos navegadores encontraron una opción, llamada Léna, o “Papá Tina” que no es otro que el la hermana pequeña del navegadorrápidamente se convirtió “El tercer padre, el tercer punto de referencia de Mathilda”.
La hermana de Tanguy Le Turquais cuidará de Mathilda
“Mathilda todavía estaba en el vientre de Clarisse cuando Tanguy me preguntó si quería quedármela”explica este último a nuestros compañeros. Por su parte, Tanguy Le Turquais explica cómo esta solución se les impuso a él y a su pareja. “Acababa de firmar por mi barco, me lanzaron al proceso de calificación. Había que encontrar una solución establecon la idea de que alguien se mude con nosotros desde los primeros meses de Mathilda, para crear un lugar real para ella y para que no se desestabilice”.detalla la navegante, acusada de haber “derrotado” a Clarisse Crémer durante la Vendée Globe 2020-2021.
“Léna vive con nosotros desde que Mathilda tenía 6 meses.. Hoy nuestra hija lo pide tanto como su mamá y su papá”.añade su hermano mayor, Tanguy Le Turquais. Una solución que a Clarisse Crémer le gustó visiblemente: “No nos preocupamos de gestionar la vida diaria durante nuestra ausencia, sobre todo porque Mathilda mantiene su pequeña vida”, continúa Clarisse. “Nuestro único temor es que le pase algo y mi ansiedad es que la voy a extrañar”..