Nueve artistas y directores de alto calibre, procedentes de nueve países, conformarán el jurado de esta edición. A su cabeza, el cineasta Luca Guadagnino, cuya carrera internacionalmente reconocida lo convierte en una figura clave del séptimo arte, particularmente admirado por su enfoque singular y estético. “Es un honor para mí presidir este festival que une mi herencia árabe y mi amor por el cine”, expresó, evocando un recuerdo personal de hace más de veinte años, cuando descubrió Marruecos por primera vez.
Junto a Guadagnino, figuras importantes del cine mundial: el director iraní Ali Abbasi, cuyo estilo inimitable es elogiado por su sorprendente realismo, la directora india Zoya Akhtar, la actriz y reciente directora estadounidense Patricia Arquette, la célebre actriz belga Virginie Efira, la actriz australiana en ascenso Jacob Elordi, así como el talentoso Andrew Garfield, la actriz marroquí Nadia Kounda y el director argentino Santiago Mitre. Juntos, su misión será decidir entre las películas en competición, otorgando la Estrella de Oro a la obra más destacada entre las 14 seleccionadas.
Conocido por obras emblemáticas como “Call Me By Your Name” y “Challengers”, Guadagnino es un director que explora continuamente temas profundos como la juventud y el deseo. Con un pie en el cine italiano y otro en las producciones internacionales, es uno de los pocos cineastas que logra este matrimonio de épocas y culturas a través de una estética poderosa y una sensibilidad única. Sus colaboraciones con actores como Tilda Swinton, Timothée Chalamet y Zendaya dan testimonio de su capacidad para revelar actuaciones de una intensidad poco común.
En un homenaje a su herencia árabe, Guadagnino dijo que el festival, y la propia ciudad de Marrakech, tenían un profundo significado para él. Su madre, de origen argelino y criada en Marruecos, le inculcó un particular apego a la cultura y los paisajes marroquíes. “Mi ADN árabe está fuertemente anclado en los poderes mágicos del Festival de Marrakech”, subrayó, evocando con emoción su regreso como presidente del jurado.
El Festival de Marrakech, que atrae cada año a miles de aficionados, se consolida así como un gran acontecimiento cinematográfico al acoger talentos de todo el mundo. Después de la Estrella de Oro concedida el año pasado a “La madre de todas las mentiras” de Asmae El Moudir, esta edición promete estar marcada por una pluralidad de expresiones y una diversidad de historias.
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