No podríamos entender nada sobre la personalidad de Leonardo García Alarcón sin considerar sus orígenes. Empezando por la inmensidad de su Argentina natal, el poder de los vínculos familiares –en parte originarios de Italia– y la base musical que el arte del tango representó para el joven Leo, encarnado por su abuelo paterno, para quien “todo el tango era poesía”. Desde su nacimiento, la más alta inspiración, artística y espiritual, ya obraba en el pequeño Leo: no obtuvo privilegios materiales (la familia era modesta, no había piano…) pero lo esencial le era dado en abundancia.
Lo que siguió es una historia de éxito bien conocida por los melómanos, en particular por los amantes de la música barroca, de esta Europa a la que Leo entró en 1997, partiendo hacia Leipzig, siguiendo los pasos de Bach, antes de dejar su bolso en Ginebra, donde fundará la Cappella Mediterranea en 2005 y La Maison Bleue en 2024, y de la que hoy comparte ciudadanía con Namur. En cuanto a Cav&Ma, fue contratado como director artístico en 2010 y desde entonces ha multiplicado producciones, grabaciones y éxitos.
La riqueza de las entrevistas que constituyen este trabajo es múltiple: descubrimos la deliciosa evocación de las personalidades que marcaron la carrera del chef argentino, desde su compatriota Gabriel Garrido hasta el belga Jérôme Lejeune (una página que vale su peso en oro), en pasando por los hermanos Kuijken, Stéphanie de Failly –la primera que lo invitó a Bélgica, en 2006–, o incluso el fallecido Patrick Davin. Allí aparece a su vez el compositor Leo, el investigador, el descubridor de partituras, el intelectual exigente y, por supuesto, el amante de la voz (en particular la de Mariana Flores, su esposa y madre de sus hijos). Y, en última instancia, es una poderosa reflexión sobre la música que emerge, rastreada en el tiempo y el espacio a través de un enfoque dual de humanista y practicante. Los conocimientos musicales de Leo son asombrosos, al igual que su arte de comunicarlos. Es para él una cuestión de amor, el mismo que le empuja a ampliar su práctica –como en estos famosos Indias galantes de Rameau presentada en estilo hip-hop en la Bastilla en 2019 – y para acercarse al público, siempre guiados por la figura emblemática de Bach: “Para mí, es la expresión de amor más concreta, legible y diáfana del mundo”.
Destacaremos también el luminoso prefacio de François Ewald, filósofo, jurista y psicoanalista francés, padrino de la Cappella Mediterranea.
⇒ Una vida de música | Entrevistas | Leonardo García Alarcón con Jean-Marie Marchal | Presses universitaire de Louvain (Colección Petites Empreintes), 200 págs., 24 €