El resto después del anuncio.
En 2011, Karin Viard habló de sus hijas Marguerite y Simone (que entonces tenían 13 y 11 años) en las páginas de estrella de televisión. “Les da vergüenza que gane tanto dinero.“, reveló entonces el que ha sido nominado trece veces al César y que ha ganado tres de ellos. “Porque en su escuela (asistieron a una escuela local donde todos los orígenes son mixtos, según la actriz en Señora Fígaronota del editor), hay niños que no tienen oportunidad“.
Raras confidencias de la actriz sobre sus hijas. Este fin de semana celebró el cumpleaños número 25 de uno de ellos, Simone. Parece haber pasado una muy buena velada, aunque en un momento se encontró sola en la pista de baile, con un sublime vestido negro de Courrèges. “Cuando celebras el cumpleaños número 25 de tu hija y eres el único que baila“, comentó la actriz con humor, antes de felicitar a su princesa: “Eres maravillosa cariño“.
Un post que evidentemente hizo mucha gracia a Alex Lutz, quien añadió un emoji de un hombre riendo en el espacio dedicado a los comentarios. “¡Tú eres el que tiene razón! Feliz cumpleaños simon“, reaccionó por su parte Andréa Bescond.
Karin Viard, ¿qué clase de madre es para Marguerite y Simone?
Al igual que Marguerite, Simone nació del matrimonio entre su madre y Laurent Machuel, director de fotografía, operador de cámara e ingeniero de sonido. Hoy, Karin Viard está totalmente enamorada de Manuel Herrero, su compañero desde hace más de cinco años, a quien le dijo “sí” en 2022.
Tenga en cuenta que no sabemos mucho sobre Simone, excepto que estudió en la Escuela de Arte y Diseño de Reims y que hizo apariciones en el cine: en El baile de actrices.s y en Políticas. Durante una entrevista concedida a Gala En noviembre de 2018, Karin Viard hizo algunas revelaciones sobre su papel como madre: “Crecí sola, mi madre nos dejó a mi hermana y a mí con nuestros abuelos cuando ella se separó de mi padre. Cuando nacieron mis hijas, fue como llegar a un campo cubierto de nieve y hacer las primeras huellas (…). Intenté, a través de mis hijas, reparar mi infancia”.
“Con mis hijas no hay ningún tabú. No tengo ningún problema en hablar de sexo con ellas, por ejemplo, aunque a algunos les parezca completamente incongruente. Después, evidentemente cada uno tiene que quedarse en su lugar”, añadió, antes de hablar de su salida del hogar familiar: “¡Oh, eso no me hace feliz! Al mismo tiempo, si los niños quieren irse, es porque hemos hecho bien nuestro trabajo. Entonces es una situación saludable. Pero a pesar de todo, no es por eso que traga bien la pastilla…”