«Sí, tata Es un libro personal… Pero no sé si es más personal que mis tres novelas anteriores. En cada uno de ellos me pongo a mí y a las personas que conocí. »
El autor, que adquirió talla internacional con Cambiar el agua de las flores.su segunda novela publicada en 2018, pregunta: “¿A qué se debe tanto entusiasmo por mis novelas? un libro como Cambiar el agua de las flores. se lee ahora en sesenta países mientras hablo de un guardia de cementerio… A través de mis novelas, sin duda doy respuestas a preguntas íntimas sobre los dolores, las alegrías, los recuerdos que conmueven a las personas…”
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“Los lectores me hablan de los personajes como si fueran seres queridos”
Más de tres años después del lanzamiento de Tresel escritor sabía que ella “muy esperado. El libro ya era el primero en ventas antes de ser lanzado porque había sido reservado…” y tata no defraudará a los lectores de la novelista, ya que encontramos los ingredientes que han forjado sus éxitos anteriores: una historia apasionante a modo de thriller, personajes entrañables y complejos e historias de amor o desencanto que siempre encuentran la manera de enredarse.
“Cuando mis lectores vienen a verme, para una firma de libros, todos me hablan de mis personajes como si no lo fueran, sino más bien cercanos, íntimos, se da cuenta el novelista. Fui coguionista: mis libros son muy cinematográficos, vemos las imágenes, un poco como si estuviéramos en un cuarto oscuro. »
Y para conceder: “Una novela como tata, también son dos años y medio de trabajo” implacable. Para el personaje de Colette, su heroína cuyo aprendizaje seguimos en un taller de reparación de calzado, “Pasé mucho tiempo en Mokhtar, un zapatero en la rue des Abesses, en París. Y lo transpuse muchos años antes, en Gueugnon…”
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“Que el lector se regocije”
Gueugnon es esta ciudad de Saona y Loira donde creció Valérie Perrin, donde toda la vida local giraba en torno al club de fútbol en el que jugaba su propio padre y en torno a la fábrica. “que tiene 300 años y da vida al corazón de esta región”.
En este contexto, Colette ama en secreto, ayuda en silencio, graba su voz en casetes de audio. En Gueugnon, Colette se cruza con Blanche, una joven artista de circo cuya gracia la hace soñar. En Gueugnon, nuevamente, Colette murió dos veces, para gran consternación de su sobrina Agnès.
“Cuando escribo pienso sobre todo en el lector, – confiesa Valérie Perrin. Quiero que haga preguntas, que esté jubiloso. Déjalo llorar. Le escribo al lector que yo también lo soy y al que le encanta dejarse llevar por una novela…”
La autora podrá añadir una serie de firmas, pero ya tiene una idea de las imágenes que utilizará en su quinto trabajo. No, la que reside habitualmente cerca de Deauville (Calvados), con su marido, el director Claude Lelouch, no acampará en este próximo escenario en la costa normanda.
“Se tratará del mar pero del Mediterráneo. Habrá mucho Marsella, cigarras, Marcel Pagnol, en esta próxima novela…”
tataAlbin Michel, 640 páginas, 24 €.