Este es un punto de inflexión en un caso que está sacudiendo a la industria musical estadounidense. El rapero Young Thug, juzgado durante casi dos años en un extenso juicio por crimen organizado, finalmente accedió el jueves a declararse culpable, informan los medios estadounidenses.
De nombre real Jeffery Lamar Williams, el artista, detenido en mayo de 2022, está acusado por los tribunales del estado de Georgia de ser el líder de una rama de la banda “Bloods” implicada en asesinatos, tráfico de drogas y robos violentos de coches. Su juicio, con cinco coacusados, es el más largo en la historia del estado.
Se declaró culpable ante un tribunal de Atlanta, capital de Georgia, de seis cargos, entre ellos posesión de drogas y armas de fuego y participación en actividades delictivas organizadas, según las mismas fuentes. La estrella estadounidense del hip-hop también dijo que no impugnó los cargos de liderar una pandilla callejera y violar la ley contra el crimen organizado de Georgia.
Tres de sus coacusados ya se declararon culpables esta semana. Los fiscales anunciaron que pedirían una sentencia de 25 años de prisión para Young Thug, con 20 años de libertad condicional.
Este interminable juicio estuvo marcado por acontecimientos dramáticos. El juez Ural Glanville, que presidió una selección del jurado que duró diez meses y luego ocho meses de procedimiento, tuvo que inhibirse en julio por concertar una reunión con los fiscales y un testigo clave, sin informar a todas las partes. Fue reemplazado por otra magistrada, Paige Reese Whitaker.
La detención en mayo de 2022 del cantante de “Best Friend”, “Hot” o “Check”, coronado con un premio Grammy en 2019 como coautor de la “mejor canción” del año, “This is America”, había ha sido un shock para la influyente escena hip-hop de Atlanta. Young Thug ha colaborado con los nombres más importantes del rap y el pop, desde Drake hasta Travis Scott, pasando por Dua Lipa, Justin Bieber y Elton John.