Steve McQueen se extravía en su crónica histórica

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“Ciudad ocupada”, de Steve McQueen. PELÍCULAS DE ASUNTOS FAMILIARES

LA OPINIÓN DEL “MUNDO” – POR QUÉ NO

El atronador debut en el cine del artista y director británico Steve McQueen – Hambriento (2008), Lástima (2011), 12 años de esclavitud (2013), preludio de una obra iracunda, sensible a la historia y a la política, hace aún más notorio el embotamiento de su notoriedad sufrido en los últimos años. Esto se debe a que, después de una película de atracos mediocre en 2018 (las viudas), el director se embarcó en proyectos apasionantes, pero no acordes con la consolidación de una carrera cinematográfica.

Lea la reseña (2021): Artículo reservado para nuestros suscriptores. “Small Axe”, la epopeya de los antillanos del Reino de Steve McQueen

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Así fue, en 2020, la miniserie Hacha pequeñae, transmitido en pantalla chica y dedicado a la historia de la comunidad antillana en Estados Unidos. Hoy se trata de un documental de más de cuatro horas -revelado en el Festival de Cannes de 2023, siempre que una película de esta duración pueda verse allí en las condiciones requeridas-, filmado en la ciudad de Ámsterdam entre la toma de la vida contemporánea y la evocación. del trágico período de la ocupación. Surgen tres razones. La primera es que el artista se ha fijado en la ciudad. La segunda es que está inspirada aquí en la obra. Atlas de una ciudad ocupada, de la historiadora Bianca Stigter, que también es su compañera. La tercera es que el motivo de la guerra siempre ha ocupado un lugar preponderante en su pensamiento artístico.

Utilizando la estructura de la obra, el director elige ciento treinta direcciones en Ámsterdam, de las que traza una evocación de lo que allí ocurrió durante la Ocupación. Sin archivos, sin mantenimiento. Filmando a los primeros en el presente, así como su entorno, confía a una locutora femenina la responsabilidad de esta crónica de los años oscuros, que cuenta, el altísimo precio que pagaron los judíos holandeses (75% muertos). , los hechos de colaboración y resistencia, heroísmo y abyección propios de este período. Dada la cantidad de trabajo histórico y cinematográfico movilizado aquí, puede parecer frívolo descartar el valor de tal esfuerzo de un plumazo.

Intuición conceptual

Sin embargo, debemos decirlo como lo decimos: Ciudad ocupada Es una película que se extravía en la concepción misma de su proyecto. Porque la disyunción radical entre banda sonora e imagen, que suponemos pretende traer de vuelta al presente las sombras del pasado, resulta allí ineficaz. La tragedia de los hechos enumerados en el primero (estigma, deportación y asesinato de judíos, sangrientas represalias de la resistencia, sacrificio solidario de ciertos ciudadanos, colaboradores locales, etc.) y la trivialidad de las imágenes de la realidad contemporánea (concierto, trineo, manifestaciones diversas, vacunaciones contra el Covid-19, etc.) son ineptitud, incluso malestar, cuando se menciona el asesinato de un grupo de personas debidamente nombradas en Auschwitz y una fiesta rave o un ejercicio de tai chi chuan al aire libre.

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