“1 año para escalar el Everest”, la notable actuación de Inoxtag

“1 año para escalar el Everest”, la notable actuación de Inoxtag
“1 año para escalar el Everest”, la notable actuación de Inoxtag
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El éxito en el Himalaya del documental “Kaizen – 1 año para escalar el Everest” es controvertido, pero dice mucho sobre el enfoque de un influencer que deja su huella en su audiencia al salir del mundo virtual. Reconectarse con la naturaleza, superarse a uno mismo, recibir de los demás, señala nuestro columnista François Morinière, es una experiencia que enseña a ser mejor.

Inoxtag, cuyo verdadero nombre es Inès Benazzouz, es un videógrafo y streamer franco-argelino de 22 años, una estrella en ascenso entre el público joven gracias a sus audiencias en la plataforma de contenidos YouTube. Apasionado por los videojuegos, se propuso un increíble reto personal al decidir escalar nada menos que el Everest, a pesar de que no es un deportista y nunca ha practicado el alpinismo. Logró su hazaña y la filmó en el documental KaizenProducido con Webedia. El joven creador de contenidos se catapultó a lo más alto de la taquilla francesa en una noche.

Una audiencia del Himalaya

Proyectado en una única sesión el viernes 13 de septiembre por la noche en varios centenares de cines de Francia y del extranjero, el documental ha acumulado nada menos que 300.000 espectadores, un nivel himalaya, superior por ejemplo a los espectadores, durante el primer día de exhibición, del mayor éxito del año en las salas. Un pequeño detalle extra (es cierto que también cuenta, en el caso de KaizenLas entradas vendidas en los países francófonos se vendieron como un verdadero fenómeno. Sin embargo, al día siguiente se programó una retransmisión gratuita en YouTube. Todo esto fue posible porque las producciones allí son cada vez más profesionales y ahora pueden llegar a las salas de cine.

Desde hace una semana, la polémica no ha hecho más que crecer porque no se ha respetado la exención concedida para un estreno excepcional en salas fuera de los marcos (siempre en miércoles, y con un tiempo mínimo para una distribución fuera de la sala en vídeo). Realmente parece que la situación se ha ido de las manos para todos, dada la increíble demanda. La película debía verse en 500 salas como máximo, y finalmente estamos hablando de 800.

Un descubrimiento de la realidad

Más allá de todos estos aspectos regulatorios y de marketing, las palabras de este joven son bastante esclarecedoras sobre su experiencia: “Duró un año. Aprendí el alpinismo, los valores de la montaña: compartir, confiar, respetar, humildad… La montaña es un lugar muy espiritual. Me permitió desconectarme de mi mundo virtual y reconectarme con la naturaleza y conmigo mismo. Estoy en YouTube desde que era pequeño. Mucha gente me sigue. A menudo todo gira en torno a mí. Al llegar a un entorno en el que no soy nadie, di un paso atrás. Finalmente, aprendí que las grandes aventuras nunca se hacen solos”. Mathis [l’alpiniste chef de l’expédition, ndlr]Mis sherpas y todo el equipo me ayudaron mucho. Aprendí de los demás, siempre con esa idea de liderar aventuras para ser mejor que la persona que fui ayer.

La grandeza de la creación

Más allá del increíble éxito de público, saludemos su madurez y el buen ejemplo que da de superación. Sin caer en los grandes clichés, podemos ver cómo muchos jóvenes necesitan perspectivas, modelos, proyectos. Comparemos las enseñanzas de este acontecimiento con las palabras del general Pierre de Villiers, que siempre dice que admira a los jóvenes de las ciudades que encuentra muy a menudo y cuyo potencial percibe, siempre que se les dé una dirección estimulante, un marco y un líder.

Y volvamos a la hazaña deportiva que tantos hombres han querido realizar sin éxito, con una tasa de fracaso de alrededor del 30%, sabiendo que la aventura suele estar destinada a alpinistas muy experimentados, acostumbrados al Himalaya. El rendimiento de Inoxtag es, por tanto, bastante notable. “Chomolunga”, el nombre nepalí de la cumbre, es decir, “diosa de los vientos”, no se conquista fácilmente, sobre todo teniendo en cuenta estos famosos y violentos vientos helados que pueden levantarse muy rápidamente. Setenta y un años después de la hazaña de Sir Edmund Hilary y su sherpa Tensing Norgay, el Everest sigue siendo un mito y el símbolo de la grandeza de la Creación.

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