DayFR Spanish

Quinta derrota consecutiva del canadiense: otra sesión de hipnosis

-

Otro partido, otra derrota. Un quinto consecutivo, un noveno en los últimos 11 partidos.

A este ritmo, el canadiense seguramente estará en la pelea: el elegido para la lotería de primera elección. Y Kent Hughes podrá conseguir su entrada o el baile del ábaco antes de Navidad.

Con este revés 5-3 ante los New Jersey Devils, los Habs ya coquetean con el fondo del circuito. Es una suerte que otros equipos de la División Atlántica, como los Bruins y los Senators, también empezaran la temporada con mala racha, de lo contrario los Montrealers estarían al borde de la derrota.

Foto AFP/GETTY IMAGES

Una vez más, es el trabajo defensivo el que se puede destacar. Como ocurrió en los dos primeros goles de los Flames el martes, el equipo de Martin St-Louis se sometió a algunas sesiones de hipnosis en su territorio.

La primera vez que Jack Hughes cruzó el área sin preocuparse demasiado antes de permitir que Jesper Bratt abriera el marcador. El segundo, cuando Jonas Siegenthaler se fue a espaldas de los cinco jugadores de los Habs, demasiado concentrado en ver a Paul Cotter pelear por el disco con Josh Anderson en la esquina del hielo.

Ni siquiera Messmer lo habría hecho mejor.

Newhook, de principio a fin

Al menos el canadiense luchó hasta el final. Lo cual faltó varias veces en octubre.

Pero no es normal que Brendan Gallagher, que juega con lo que le queda de vapor de gasolina a sus 32 años, sea quien se lance con más ganas a la red.

Lo que le valió al veterano su cuarto gol en seis partidos, el sexto desde el inicio de la temporada.

Está el segundo trío al que no se le puede reprochar mucho. Jake Evans viene de la misma rabia por ganar que la de Gallagher. La unidad que forma con Juraj Slafkovsky y Alex Newhook fue por segunda vez en otros tantos encuentros desde que existe la más amenazante en el campo de Montreal.

Después de llamar a la puerta en varias ocasiones el martes, Alex Newhook añadió dos goles a su palmarés. Su segundo, que marcó tras cruzar el hielo de un extremo al otro con el disco, fue una preciosidad.

Circulan rumores según los cuales, en este momento, Jean-Nicolas Blanchet, mi colega de Diario de Quebecintentó borrar todo rastro de su columna del jueves por la mañana en la que cuestionaba la adquisición de Newhook.

Silencio preocupante

Dado que los Canadiens no son capaces de tener cuatro líneas funcionando al mismo tiempo, el reciente éxito de esta segunda unidad reinventada coincide con el repentino silencio de la primera línea.

Entre ellos, Cole Caufield, Nick Suzuki y Kirby Dach se limitaron a tres tiros y un total de siete intentos. Recuerde que estos tres atacantes obtienen dos tercios de los minutos que los Habs juegan en el juego de poder.

Dado que siguen siendo las dos armas principales de los Habs, era normal que Caufield y Suzuki se encontraran en el hielo cuando Martin St-Louis eliminó a Samuel Montembeault en favor de un sexto atacante.

El entrenador en jefe canadiense les había añadido a Newhook y Gallagher. No tuvo el efecto deseado, pero fue una prueba del aprecio de St. Louis por el trabajo realizado al principio del juego.

Mientras tanto, Dach calentaba el banquillo.

Related News :