Después de una segunda mitad de 2024 muy interesante que le permitió volver a las puertas del top 50 y volver a sonreír, ¿nuestro compatriota volverá a sumergirse en sus dudas e incertidumbres? Todavía es pronto para gritarlo en voz alta porque en el mundo del tenis la verdad de una semana no es especialmente la de la siguiente. En cada torneo, los contadores se ponen a cero y basta una buena campaña en Melbourne, en el primer Grand Slam de la temporada, para olvidar las preocupaciones de un comienzo de año complicado. De no ser así, David Goffin, que viaja con su mujer y su hija en esta gira por Australia, no habría aprovechado un mes de enero en el que no tenía muchos puntos que defender. Y cuando sabemos el lugar que ocupa la confianza en el juego del nativo de Rocourt, tal situación no auguraría nada bueno para el resto de este primer trimestre de 2025. Pero bueno, no sería la primera vez que el ex finalista de El Masters 2017 de repente encuentra color.
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Sin embargo, si echamos la vista atrás, comprobaremos que el Grand Slam australiano no le sonríe a nuestro compatriota desde hace varios años. Eliminado en primera ronda en 2021, 2022 y 2024, se retiró de 2023 en el último minuto por intoxicación alimentaria…
