Hace dos meses, antes de enfrentarse al OGC Niza, Luis Enrique, como suele hacer, defendió a sus jugadores, en este caso a Gianluigi Donnarumma, criticado por sus actuaciones en la portería del PSG. “Cuando hay una derrota es muy triste pegarle a un jugador. A menudo molestamos a Donnarumma, por favor déjenlo en paz y cuídenme, dijo el español. Siempre trato de proteger a mis jugadores. El responsable de las derrotas es el entrenador. »
Han pasado unos sesenta días desde este episodio y el ex entrenador de La Roja ve abrirse un nuevo frente. La lanzada por algunos de sus jugadores, según indica el diario El equipo y RMC Sports, debido en particular a los malos resultados ante el Bayern de Múnich en la Liga de Campeones (1-0) y al empate ante el Nantes en el Parque de los Príncipes (1-1). Ousmane Dembélé y Presnel Kimpembe estarían especialmente descontentos con el destino que les tenía reservado.
El exjugador del Borussia Dortmund no habría apreciado las críticas de Luis Enrique tras su tarjeta roja ante los bávaros. Colocado en el banquillo ante Canarias, tuvo una entrada poco convincente y no ofreció mucho ante un equipo reagrupado en sus últimos 30 metros. Al finalizar la reunión, Luis Enrique explicó esta decisión abogando por la competencia.
“Cada resultado aporta información”
« No tengo quejas contra mis jugadores. Pero quiero que todos mejoren, que se revelen, que entrenen fuerte cuando no juegan o no calientan, que el titular piense en perder su lugar, que el goleador piense en marcar más goles, que deje al que defiende. Pues piensa en dar el máximo. Cualquier información recopilada durante los partidos y cualquier resultado proporciona información. »
De acuerdo a El equipoPresnel Kimpembe no entendería su exclusión del grupo parisino ante el Nantes, apenas unos días después de haber realizado el viaje con todo el equipo a Múnich. Y la gestión del ex entrenador de la Roma plantea interrogantes internamente, sobre todo con posiciones muy firmes. Algunas de sus declaraciones públicas también serían motivo de la ira de algunos jugadores.
Por último, el caso Randal Kolo Muani también debería echarse a la bolsa de Luis Enrique, que ya no recurre al ex del Nantes, prefiriendo a Gonçalo Ramos, recuperado de una lesión, Kang-in Lee o Marco Asensio. Comprado por 90 millones de euros al Stuttgart, RKM, que se desempeña bien con los ‘bleus’, cuenta con el apoyo de sus compañeros, que no comprenden su situación.