Diez años después de su marcha libre, Kingsley Coman podría regresar al Paris Saint-Germain este verano. El extremo del Bayern de Múnich no se opone a la idea de regresar a su club de formación. Y sus directivos no se opondrán a su cesión en caso de oferta considerada adecuada.
¿Y si el sucesor de Kylian Mbappé fuera francés? Para compensar la salida gratuita de su máximo goleador, el Paris Saint-Germain planea contratar un extremo izquierdo. Se mencionan los nombres de Khvicha Kvaratskhelia, retenido por el Nápoles, y el delantero del Manchester United Marcus Rashford. Pero no hay que descuidar el camino que conduce a Kingsley Coman. Recordemos que el titi parisino abandonó su club de formación libre en 2014.
En aquel momento, el poco tiempo de juego que le concedía el ex entrenador Laurent Blanc le animó a firmar su primer contrato profesional en la Juventus de Turín. Podemos decir que Kingsley Coman tomó la decisión correcta. Ya sea en los Bianconeri o en el Bayern de Múnich, el polivalente extremo recibió la confianza que buscaba, sin olvidar los numerosos trofeos que se sumaron a su palmarés. Ahora está listo para regresar al Paris Saint-Germain por la puerta grande, anunció el medio alemán Sky Sport a principios de semana, antes de la confirmación del diario Bild.
El Bayern quiere entre 40 y 50 millones de euros
De hecho, nos enteramos de que Kingsley Coman tiene la intención de dejar el Bayern de Múnich este verano. Sobre todo porque sus dirigentes no se oponen a su salida, a condición de recuperar una suma considerada adecuada para su traslado. Para liberar al internacional francés de su contrato de tres años, el gigante de la Bundesliga exigiría entre 40 y 50 millones de euros. Una cantidad a priori asequible para el Paris Saint-Germain y que permitiría disponer de un jugador capaz de correr por ambos carriles. Su perfil también interesa al FC Barcelona. Pero dados sus problemas con el juego limpio financiero de La Liga, el Barça no debería representar una amenaza para los parisinos.
