Y, sobre todo, y esto es bastante raro como para mencionarlo, ¡Nibombe es un defensa central! Al igual que Jordy Mokio, forma parte de una generación de últimos hombres con un potencial innegable. Duro con el hombre, buena velocidad, pero a veces un poco indiferente. Un defecto que se puede borrar con la experiencia.
El Manchester United o el Bayern de Múnich habían venido a preguntar por el ex capitán de la selección belga sub-16 (y hoy capitán de la sub-18), pero sin una oferta concreta puesta sobre la mesa.
Sólo que fue el club del Principado el que logró convencer al gigante de Marcinelle. La tarea no fue fácil. Deseando negociar rápidamente su contrato con Charleroi para obtener el estatus profesional a los 16 años, las negociaciones fueron duras. La salida de Charleroi hacia otro destino parecía inevitable. Anderlecht -con quien completó parte de su formación entre 2018 y 2021- o Genk estuvieron en el lugar. Finalmente será en Mónaco donde dejará sus maletas en el verano de 2023, y con éxito. La temporada pasada, cuando sólo tenía 16 años, se consagró como un peón indispensable en la plantilla sub-19, disputando 16 partidos y marcando un gol.
Esta temporada, Nibombe tuvo la oportunidad de mostrarse en la Youth League, donde ya disputó tres partidos sin abandonar nunca el once inicial. El Mónaco U19 incluso logró vencer al Barcelona. Suficiente para darle una primera aparición en el banquillo del primer equipo. Y un nombre para recordar de cara al futuro de nuestra selección, que ya suma una veintena de internacionalidades con las selecciones juveniles.