La situación puede parecer paradójica. A pesar de la apertura de camas y de varias contrataciones, la AP-HP (Asistencia Pública – Hospitales de París) anunció este martes 14 de enero que su déficit se amplió en 2024 hasta alcanzar los 460,6 millones de euros. Un deterioro de 62 millones respecto a 2023, pero sobre todo 166 millones de euros más que la suma prevista en el plan global de financiación plurianual.
Una paradoja porque, al mismo tiempo, la AP-HP experimentó un relanzamiento de su actividad tras una pandemia de Covid-19 que causó enormes daños al establishment. “Entre 2019 y principios de 2023, la AP-HP perdió el 12% de sus enfermeros (es decir, 2.000 en los 38 hospitales) y aumentamos al 20% de las camas cerradas”, informa este martes por la mañana a France Inter su director general, Nicolas Revel. . “Es cierto que sufrimos un shock que no tiene precedentes”, reconoce.
600 camas abiertas entre 2022 y 2024
Ante esta observación, a finales de 2022 se lanzó un plan de acción. Titulado “30 palancas para actuar juntos”, su objetivo es “atraer y retener al personal sanitario para permitir una reapertura de las capacidades sanitarias”, indica la AP-HP en un comunicado de prensa. Y dos años después del lanzamiento de este plan, los primeros empiezan a sentirse con la apertura de 600 camas entre octubre de 2022 y octubre de 2024.
“Durante dos años hemos vuelto a la normalidad. Empezamos a revertir la tendencia en el verano de 2023 y terminamos el año con un pequeño repunte de 220 enfermeras más. Entonces 2024 fue realmente un año de aceleración de esta recuperación ya que se sumaron 950 profesionales de enfermería adicionales. Estamos a poco más de la mitad del camino”, anuncia Nicolas Revel.
“Pero lo clave es que esta gente se quede en AP”, advierte el director general. “Siempre tenemos salidas y no hay una medida mágica, ni una palanca única. Debemos actuar sobre toda una serie de elementos que configuran el día a día de los cuidadores. Por ejemplo, hemos hecho un esfuerzo enorme en materia de vivienda. Antes, la AP-HP podía asignar entre 500 y 600 viviendas cada año, ahora hemos aumentado a 1.200”, afirma Nicolas Revel. Y para resumir: “Intentamos centrarnos en todo lo que contamina la vida de los cuidadores. »
No se activó ningún plan blanco
En su comunicado de prensa, la AP-HP anuncia que quiere “continuar la reconstitución de la población activa” iniciada hace dos años, en particular aumentando más de 1.000 equivalentes a tiempo completo (ETC). Se esperan 815 FTE de cuidadores, incluidas 600 enfermeras, 100 cuidadores y otros 115 cuidadores que trabajan en profesiones estresantes.
La situación de AP-HP llega en un momento en que sus hospitales no son inmunes a la epidemia de gripe. Nicolas Revel indica que en los 17 servicios de emergencia, hasta 250 pacientes se encontraron en camillas esperando ser hospitalizados, en comparación con alrededor de cien en un día normal. “En cuanto a la gripe súper intensa, que duró unos veinte días, pudimos hacerle frente”, en particular gracias a las 600 nuevas camas. “Hemos cancelado algunas estancias previstas en los departamentos médicos. Pero no activamos el plan blanco porque fundamentalmente permite recuperar al personal de sus licencias, y no era necesario hacerlo. »
“Pero también vemos regularmente que el hospital se ve rápidamente bajo presión. La gripe no ocurre cada 100 años. Seguimos siendo extremadamente frágiles”, admite.