En una exposición así no se deja nada al azar. Y todo está imaginado con mucha antelación. Lo mismo ocurre con la escenografía, en la que Bruno Ely, el comisario, había trabajado para la empresa especializada Studio Matters, experimentada en grandes eventos. “La decoración impresionista”, en el Museo de la Orangerie en 2022, Gaudí en el Museo de Orsay, el mismo año y, ya en Granet, “El faraón Osiris y la Momia”, entre 2020 y 2021, fue esta empresa.
Para Cezanne, la escenografía ofrecerá un recorrido a la vez cronológico y temático. Con, casi desde el principio, una sala excepcional que recreará el gran salón de la bastida de Jas de Bouffan. Fue en esta sala, sobre las grandes paredes, donde el joven Cézanne creó sus primeras obras. Éstos, descolgados de las paredes, algunos revendidos mediante corte, se esparcieron por todo el mundo.
Para la exposición, el museo Granet recuperará una buena parte del mismo. Se colocarán como originalmente. “Pudimos tener Las cuatro estacionesque proceden del museo Petit Palais de París. Y desde hace diez días estamos seguros de tener el retrato de Louis-Auguste Cézanne, el padre de Paul, que tenía entre Las Cuatro Estaciones, confiesa Bruno Ely. ¡La National Gallery de Londres tuvo que aceptar no exponer este cuadro durante su gran retrospectiva organizada con motivo de su 200 aniversario!” También estarán presentes “El juego del escondite” según Lancret o “El gran bañista”. Pero seguramente no “Cristo en el limbo” ni “La Madeleine o la Pain”, que a priori no serán cedidos por el Museo de ‘Orsay debido a su mal estado.
Related News :