lo esencial
Julien Canet ofrece una inmersión en la intimidad de la vida salvaje, el 25 de octubre a las 20 h en el cine.
“Ven a descubrir esta naturaleza preservada a través de una conferencia y la proyección de una película de 13 minutos sobre el patrimonio natural del futuro Gran Sitio de Francia Montségur. Sea testigo del cuidadoso cuidado de la perdiz blanca, de los desfiles amorosos del urogallo o de las cabalgatas de ¡Los isardos! Sería una pena privarnos de honrar esta invitación del fotógrafo de naturaleza Julien Canet a esta velada cultural gratuita.
La hija de Montferrier, nacida en Lavelanet, siempre ha sido una apasionada de la naturaleza. Fue a través de la fotografía que quiso experimentar plenamente su amor por las montañas, su vida salvaje y sus paisajes. Se instaló en Soula, desde donde puede contemplar cada día los espectáculos que ofrece el patrimonio paisajístico del Gran Sitio. El atractivo de las cimas del macizo de Tabe le invita a coger su cámara y captar la vida que allí se desarrolla.
“Este parque infantil, que ahora conozco muy bien, me permite fotografiar una diversidad excepcional de especies. Desde hace más de 10 años expreso a través de la fotografía mi admiración y respeto por esta tierra de lirios y flores. Especializado en mamíferos de montaña, he el privilegio de estar en contacto profesional y regular con esta fauna salvaje.”
La calidad de embajador de la solicitud de la etiqueta Gran Sitio de Francia Montségur es evidente para el Ferrimontain de corazón. “Estoy feliz de ayudar a revivir el Pays d’Olmes, que ha sufrido mucho por el declive industrial”. A partir de 2021 expuso sus creaciones en el mercado de la primera Fête de la montagne de Montségur. Su lealtad no ha flaqueado desde entonces.
Un arte destinado a ser accesible a todos.
“Esta naturaleza necesita ser respetada más que nunca y tengo presente que el asombro es el primer paso hacia el respeto”. El objetivo de transmitir esta bonita idea a todos los públicos no le abandona nunca. “El problema del arte es que puede ser elitista. Por eso, para hacerlo accesible a todos, ofrezco productos a precios bajos en mi stand en mercados y ferias de artesanía. Durante mis encuentros con el público, me esfuerzo por hablar con sencillez, por crear un vínculo con los vivos del que nos hemos desconectado demasiado. Si el profano sabe diferenciar un ciervo de un ciervo después de conocerme, ¡he ganado!