A pesar de un 2024 turbulento, Red Bull y Max Verstappen han logrado mantener su condición de aspirantes al título. Una mirada retrospectiva a los momentos clave de una temporada turbulenta y los pensamientos del cuatro veces campeón del mundo.
El año 2024 no ha sido nada tranquilo para Red Bull Racing. Entre escándalos internos que involucran a Christian Horner y la salida de figuras clave como Adrian Newey y Jonathan Wheatley, el equipo ha capeado una auténtica tormenta.
Max Verstappen, como buen capitán, mantuvo el rumbo en la pista. Sin embargo, la agitación ha planteado dudas sobre su impacto en el desempeño general del equipo. Preguntado por estos episodios, Verstappen se mantiene lúcido.
“Nunca es agradable para el equipo, ni para el propio Christianconfió Verstappen esta semana. Pero al final tenemos que centrarnos en el rendimiento, porque esa es nuestra misión”.
El piloto holandés confirma haber presenciado numerosos intercambios entre bastidores, precisando que la prioridad era permanecer unidos para superar las dificultades.
Apoyo inquebrantable a Helmut Marko
Si Verstappen ha sido discreto respecto a las polémicas en torno a Christian Horner, no dudó en defender a Helmut Marko. El histórico asesor de Red Bull estaba en el centro de una lucha de poder y había sido silenciado.
Ante la amenaza de que Marko se fuera, Verstappen fue claro: ¡Si Marko tiene que irse, él también se iría! Él explica hoy: “Helmut ha sido esencial para mi carrera. Es casi como un segundo padre para mí. Hemos pasado por muchas cosas juntos y eso crea una lealtad inquebrantable”.
Esta declaración fue vista como una señal fuerte. Según Verstappen, su opinión pesó en la balanza para calmar las tensiones internas y evitar la salida del mentor austriaco.
Rumores de transferencia de Mercedes
Aparte de la agitación interna, la temporada de Verstappen se ha visto empañada por persistentes rumores que lo enviarían a Mercedes F1. Toto Wolff, director de la escudería alemana, incluso admitió haber tenido conversaciones con el piloto holandés.
Cuando se le pregunta sobre estos contactos, Verstappen se muestra pragmático:
“Los grandes equipos siempre están interesados en los pilotos más rápidos. Pero estoy muy feliz en Red Bull. Es como una familia para mí”.
Si no cierra completamente la puerta a un cambio de equipo en el futuro, el cuatro veces campeón del mundo insiste en su fidelidad a Red Bull: “Todavía soy joven, pueden pasar muchas cosas, pero por ahora me siento bien donde estoy”.
El deseo de mantenerse centrado en el rendimiento.
A pesar de las distracciones, Verstappen mantuvo un estado mental imperturbable. Supo mantenerse centrado en el rendimiento, aunque eso implicara dejar de lado rumores y polémicas: “Hay cosas mucho peores en la vida. Para mí no fue difícil mantener la concentración en la carrera”.
Verstappen concluye dejando de lado los debates sobre su condición de “GOAT” (mejor piloto de todos los tiempos): “Ha habido grandes pilotos en todas las épocas, es imposible compararlo. Para mí lo importante es divertirme y ganar tanto como sea posible”.
¿El futuro con Red Bull o en otro lugar?
Mientras algunos consultores lo presionan para que asuma nuevos desafíos en otro equipo, Verstappen sigue concentrado en el momento presente.
“Empecé en Red Bull y me encantaría terminar mi carrera aquí. Pero nunca se sabe lo que depara el futuro. Por ahora, estoy feliz y no tengo motivos para irme”.
Así, a pesar de las tormentas internas y las llamadas de la competencia, Max Verstappen parece sólidamente anclado en Red Bull. ¿Por cuánto tiempo? Sólo el tiempo lo dirá.
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