La retirada de Michael Andretti desbloqueó la situación
El hijo de Mario, campeón del mundo de F1 en 1978, llevaba varios años intentando entrar en la F1 y había obtenido el acuerdo de la FIA tras invitar a General Motors al proyecto. Finalmente, poco después de la salida de Andretti, cuyos gestos y actitudes causaron mucha irritación en el paddock, las cosas se desmoronaron. Durante el verano, Dan Towriss, que había invertido en Andretti Global durante varios años, tomó el control total, mientras que Michael Andretti abandonó por completo la estructura que también se dedica a los coches de Indycar y Fórmula E. Towriss es el propietario del Grupo 1001, especializado en seguros.
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