Max Verstappen fue ascendido a Red Bull después de solo cuatro carreras en 2016, a pesar de tener solo un año de experiencia antes. El tres veces campeón del mundo de F1 revela que se esperaba que fuera el año siguiente.
“Este ascenso al equipo principal ya estaba fijado para el año siguiente, para 2017” reveló Verstappen en el documental “10 años de Max Verstappen”. “El hecho de que llegara en 2016 fue algo bueno”.
El holandés recuerda que lo llamaron a Austria para ver a Helmut Marko y luego a Milton Keynes para prepararse: “También fue una especie de alivio cuando me dijeron el día después de la carrera en Sochi que tenía que ir primero a Graz, a Helmut Marko y luego a la fábrica en Inglaterra”.
Una decisión valiente recompensada por Red Bull con una victoria en su primera carrera con el equipo: “Este inicio fue muy bien, porque todavía había gente que tenía dudas”.
“Pero luego gané esa carrera, aunque hubo un poco de suerte. Pero aún así es bueno demostrarlo. El fin de semana siguiente en Mónaco no fue bien, pero cuando ganaste la carrera anterior, eso es lo que la gente recuerda”.
Su siguiente período de dudas llegó a principios de 2018, cuando cometió una serie de errores y malas actuaciones, hasta el punto de amenazar a los periodistas que le preguntaron qué le pasaba en su conducción.
“En ese momento estaba realmente enojado. En algún momento, ya es suficiente. Sé que cometí errores en ese momento. Pero no puedes seguir quejándote. Porque en ese momento, casi le doy un cabezazo a alguien”.
Ahora Max Verstappen lleva mucho tiempo conduciendo con un motor Honda en Red Bull. Después de altibajos, su asociación está a punto de terminar después de 2025, ya que Red Bull creará sus propios motores junto con Ford, mientras que Honda se asociará con Aston Martin. El holandés elogió al proveedor japonés de motores.
Y al año siguiente, Honda se sumó al proyecto de Red Bull: “Yo también me emocioné mucho cuando Helmut me dijo que vendría Honda. Le dio nueva energía al equipo”.
“Hicimos una gira por Japón, en el Sakura. Allí vimos que el potencial realmente estaba ahí. Todo lo que teníamos que hacer era encontrar algunas personas para llevar a cabo todo el proyecto. Al final todo salió bien”.
Recuerda que fue un gran alivio para Honda, después de cuatro temporadas difíciles con McLaren F1 y Toro Rosso, encontrar finalmente el camino hacia la victoria: “La primera victoria fue muy emotiva para ellos. Simplemente se quejaban en el garaje”.
“Para ellos, por supuesto, es una gran satisfacción, porque tuvieron un comienzo muy difícil cuando regresaron a la Fórmula 1. Pero nunca se dieron por vencidos. Creo que eso también es típico de la mentalidad japonesa”.
A pesar del inminente fin de su asociación, Verstappen recuerda con cariño su paso por Honda: “Nunca se rendirán y, a veces, los europeos realmente pueden aprender algo de esto”.
“También es agradable verlo con ingenieros, por ejemplo. Trabajas con muchas culturas diferentes y funciona. Realmente disfruto ser parte de este equipo”.
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